Por Dennis Pamlin*

(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – La relación con el mundo ofrece la oportunidad de entablar un diálogo que permita cambiar los puntos de vista obsoletos y prejuiciados sobre el país.

Si bien China ocupa el centro de no pocos debates en el mundo actual, los medios de comunicación la presentan todavía como agresiva y no abierta al diálogo.

Pero si los medios de comunicación extranjeros dedicaran más tiempo a aprender sobre china y sostener un diálogo constructivo, podrían darse cuenta que este no es el caso. Desafortunadamente es poco probable que eso suceda, porque muchos de los países ricos están hoy en declive y adoptan una mentalidad retrógrada. Debido a ello, en los medios de comunicación mundiales, tanto en los tradicionales como en los nuevos, predominan aún las viejas ideas y los estereotipos sobre China.

Sin embargo, en los próximos años la imagen de china estará cada vez más conectada con el mundo, un mundo en el cual las personas no serán solo consumidores pasivos de información, sino que muchos de ellos se convertirán en proveedores de información a través de distintos medios. En un mundo conectado, las personas confiarán más en las redes sociales que en los medios tradicionales y las redes sociales más creíbles crearán una imagen virtual de China.

Esta imagen digital de China será determinada por las imágenes, historias, comentarios, páginas personales y vídeos subidos a Internet, en lugar de la información que aporten los medios impresos, la televisión y la radio. Por ello China presta tanta atención a su “gemelo digital”.

En un mundo conectado ya no es suficiente hacer bien las cosas y decirle a la gente sobre ello, resulta necesario también entablar un diálogo con la gente alrededor del mundo. Si China no establece esa comunicación, su gemelo digital será distorsionado.

Vamos rápidamente hacia una sociedad superconectada donde la transparencia y la gran cantidad de información están creando nuevas oportunidades y nuevos desafíos. Con el fin de superar los retos y aprovechar las oportunidades es importante que China y aquellos con una comprensión de China exploren nuevas formas de fomentar el diálogo para que su gemelo digital no se adapte a la agenda de los demás.

Es importante admitir que el resurgir de China como una gran voz global acarreará tensiones y que en algunas áreas emergerán significativas diferencias. Pero también es importante reconocer que el mayor desafío mundial no se resolverá sin la participación activa de China. Estos retos van desde el cambio climático y la escasez de agua hasta la creciente resistencia a los antibióticos y la pobreza.

Para incrementar el diálogo y la transparencia, China podría respaldar el establecimiento de una plataforma global donde las acciones ayuden a resolver los desafíos globales en diferentes países que se puedan presentar. Con el fin de asegurar que la plataforma es impulsada por los usuarios y que se seleccionan los criterios necesarios para encontrar las mejores prácticas, se debe involucrar a los gobiernos, organismos de las Naciones Unidas, organizaciones no gubernamentales e instituciones académicas. Por otra parte, los blogueros líderes con un alto nivel de credibilidad deberán ser invitados también a ofrecer información y sugerencias sobre las áreas que sea necesario tratar.

La plataforma podría ser usada además como una base de dato en la que la personas puedan encontrar ejemplos de soluciones efectivas aplicadas en distintos países. Aparte de una oportunidad para incrementar el diálogo, la posibilidad de contactar con diferentes partes interesadas podría ser una forma de incrementar la transparencia y demostrar el trabajo concreto que China está haciendo.

Los desafíos que enfrenta la humanidad en el siglo XXI requerirán conceptos diferentes a los que aplicaron los países occidentales para la creación del actual sistema internacional. Pocos países como China tienen un tesoro de conceptos tan grande que pueda ayudar a la humanidad a navegar entre los complejos desafíos que se avizoran.

Muchos de los retos globales tienen soluciones razonablemente sencillas, pero en lugar de entablar un diálogo constructivo, algunos países eligen culparse unos a otros de ser la causa del problema. Actualmente la mayoría de las iniciativas están basadas en el terreno nacional o multilateral, algo que no es óptimo para el logro de soluciones prácticas a desafíos mundiales.

China puede establecer equipos de colaboración con la participación de muchos países para ayudar a enfrentar los desafíos del mundo desde una perspectiva global. Concentrarse en la colaboración práctica en lugar de la polarización podría permitir avanzar en muchas cuestiones.

Como parte de los largos debates sobre los valores y conceptos necesarios para orientar el desarrollo global, China podría respaldar una iniciativa para desarrollar material educativo para los ciudadanos del mundo. Las primeras clases globales con la participación de personas de todos los rincones del mundo podría ser parte de esa iniciativa.

Este es solo un ejemplo y muchos más se pueden presentar para comprometer a China como socio de un diálogo y crear un gemelo digital que refleje la realidad de China como un actor responsable en la comunidad internacional.

El autor es el fundador de la consultora sueca 21st New Frontiers.

Los artículos de opinión reflejan los puntos de vista de sus autores, no necesariamente los del china.org.cn.