El mayor partido político del mundo tiene una ardua tarea: dirigir la masiva economía de China cuando está perdiendo vigor en un momento en que se aproxima el cambio de liderazgo que se lleva a cabo una vez por década.
Empresarios extranjeros están observando hacia dónde navegará el barco chino bajo una nueva dirigencia del Partido Comunista de China (PCCh), que surgirá durante el XVIII Congreso Nacional del Partido, el cual se sostendrá el 8 de noviembre.
Continuará China siendo la preferida de los inversionistas extranjeros en el futuro? Ejecutivos de algunas firmas extranjeras entrevistados por Xinhua se mostraron optimistas antes del congreso.
La desaceleración dentro y fuera de China ha tenido un impacto en la inversión externa, pero los negocios extranjeros siguen teniendo confianza en sus perspectivas de crecimiento y oportunidades de inversión en el país.
Para desplegar más el potencial de crecimiento de China, se necesitan reformas gubernamentales más audaces para liberalizar ciertos sectores y reequilibrar la estructura económica, opinaron.
Tomihiro Saegusa, representante general en China del minorista japonés Ito Yokado, dijo que su compañía se beneficiará del efecto de recuperación de las provincias del medio oeste de China y de una creciente población de ingresos medios, los clientes potenciales de la firma.
Pese a la desaceleración de las ventas en la ciudad suroccidental de Chengdu, su principal base en China, la firma Ito Yokado solicitó autorización del gobierno este verano para establecer una firma de inversión en Beijing para expandir sus operaciones a nivel nacional.
También planea establecer una subsidiaria este año en Chongqing, una metrópoli cerca de Chegdu, y en los tres años próximos abrir tres tiendas departamentales más en Chengdu.
Incluso ante las crecientes tensiones entre China y Japón sobre las Islas Diaoyu, la firma no tiene intención de cambiar sus planes de inversión, aseguró Saegusa.
El avance del gigante minorista japonés contrasta con los datos oficiales que muestran una caída anual de 3,4 por ciento en la inversión externa directa (IED) en China durante los primeros ocho meses de 2012. Entre 2003 y 2011, la IED aumentó 9,2 por ciento anualmente en promedio.
Algunos sospechan que China está perdiendo atractivo para los inversionistas extranjeros, pues el crecimiento de dos dígitos que experimentó durante la década pasada es insostenible y su ventaja previa como la fábrica del mundo está comenzando a desvanecerse.
Pero para inversionistas como Saegusa, China seguirá siendo una prioridad de inversión por el enorme potencial de crecimiento que puede ser aprovechado mediante la urbanización, industrialización, transformación estructural e innovación tecnológica actuales.
Ellos creen que la economía del país creará aún mayores oportunidades para los negocios extranjeros si se lleva a cabo con éxito un reequilibrio. Aunque China puede ser menos atractiva para ciertos tipos de inversión externa por los crecientes costos de producción y salariales, está ganando el favor de muchos otros, señalaron.
A pesar de el suavizado crecimiento de China podría afectar a los negocios de Siemens en el país, Siemens sigue viendo "oportunidades enormes" en la transición de China hacia un crecimento más eficiente y sostenible, dijo Mei-Wei, presidente de la empresa Siemens Northeast Asia.
"He leído el texto completo (del XII Plan Quinquenal de China) y tuve que asegurarme de que mi gente entendiera de qué trata todo el plan", dijo Cheng al referirse al plan del gobierno para el periodo 2011-2015, que da prioridad a las reformas estructurales y al desarrollo sostenible.
El año pasado, Siemens firmó un memorándum para extender la cooperación general con la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China como continuación de una asociación histórica entre China y Siemens, la cual fue establecida en 1985.
Bajo el acuerdo marco, Siemens ampliará la cooperación con China en áreas relacionadas con la modernización industrial, innovación tecnológica, ahorro de energía y reducción de emisiones, así como en el desarrollo del medio oeste de China.
La compañía anunció el año pasado que construirá su mayor fábrica digital en China, en la ciudad de Chengdu. (Continúa