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Desarrollo de la economía nacional |
Sistema económico |
Antes de la fundación de la República Popular
China en 1949, el país era como un gigante extremadamente
pobre y débil, y tenía una población
de cerca de 500 millones de habitantes y una superficie
de 9,6 millones de kilómetros cuadrados. La producción
anual más alta de los principales productos industriales
de todo el país apenas era: 445.000 toneladas de
hilo de algodón, 2.790 millones de metros de telas,
61,88 millones de toneladas de carbón, 6.000 millones
de kw/h de electricidad; la producción cerealera
anual más alta era de 150 millones de toneladas y
la de algodón, 849.000 toneladas. La economía
de la nueva China inició sus primeros pasos sobre
estas miserables condiciones. Gracias a la política
de reforma y apertura que se puso en práctica desde
1979, la economía china conoció un desarrollo
inaudito.
Gracias a la construcción económica a gran
escala, que China promovió durante más de
50 años, el país se ha convertido en una
potencia económica con mayor potencialidad de desarrollo
en el mundo. En su conjunto, el pueblo ya lleva una vida
modestamente acomodada. Entre 1953 y 2000, China llevó
a feliz término sus nueve Planes Quinquenales y
consiguió éxitos admirados por todo el mundo,
echando una sólida base al desarrollo de la economía
nacional.
La reforma del sistema económico constituye uno
de los importantes contenidos de la reforma que procura
China. En los primeros 30 años después de
la fundación de la nueva China, el gobierno chino
aplicaba el sistema de economía planificada. La
“Comisión de Planificación”,
órgano estatal especializado, se encargaba de programar
y definir las metas del desarrollo económico en
los diversos sectores. Las fábricas producían
productos según el plan estatal, las zonas rurales
cultivaban según el plan estatal y los departamentos
comerciales se surtían y vendían mercancías
según el plan estatal. De manera unificada, los
departamentos de planificación establecían
las variedades, el número y el precio de todos
los artículos. Este sistema económico permitió
que la economía china se robusteciera a pasos firmes.
Sin embargo, por otro lado, limitó su vitalidad
y la velocidad de desarrollo. En las postrimerías
de los años 70 del siglo XX, los dirigentes chinos
de aquel entonces estuvieron conscientes de la diferencia
entre la velocidad de desarrollo de la economía
china y la de la mundial, y tomaron la importante decisión
de reformar el sistema económico que China había
practicado durante varias décadas.
En 1978, la reforma comenzó por las zonas rurales.
Allí se aplicaron el sistema de responsabilidad
por contrato basado en la familia y con ingresos en función
del rendimiento. Los campesinos volvieron a tener el usufructo
de las tierras, y pudieron organizar sus labores agrícolas
según su propia voluntad, vender sus productos
y decidir qué y cuánto a cultivar. Se concedieron
mayores alternativas a los campesinos en la administración
de sus productos agrícolas, se suprimieron las
adquisiciones unificadas y asignadas de los productos
agrícolas y de ocupaciones secundarias, liberando
el precio de la mayoría de esos productos, se abolieron
muchas políticas restrictivas y permitieron a los
campesinos dedicarse a diversas actividades y administrar
empresas de cantón y poblado. Todas estas medidas
estimularon con gran energía el entusiasmo de los
campesinos en la producción.
En 1984, la reforma del sistema económico se extendió
a las ciudades de las zonas rurales.
En 1992, después de más de 10 años
de experimentos con la reforma y la apertura, el Gobierno
chino definió en términos más claros
el rumbo del desarrollo de la reforma, o sea establecer
un sistema económico de mercado socialista. Según
los documentos que el Gobierno chino publicó, el
contenido principal de la reforma del sistema económico
es: Asegurar el sistema económico básico
con la propiedad pública como lo principal y varios
elementos económicos en desarrollo conjunto; transformar
el mecanismo de gestión de las empresas de propiedad
estatal y establecer una estructura empresarial moderna,
acomodada a la demanda de la economía de mercado;
fundar un sistema nacional de mercados abierto y unificado
y hacer realidad la integración entre los mercados
urbano y rural y entre el mercado nacional y el internacional,
fomentando la distribución optimizada de los recursos;
cambiar las funciones del gobierno de administrar la economía,
establecer un sistema mejorado de regulación y
control macroeconómicos que tiene como lo principal
los medios indirectos; establecer un régimen de
distribución de los ingresos, en el cual prima
el principio de “a cada cual según su trabajo”,
se prioriza la eficacia y la justicia es la regla, y estimular
a ciertas zonas y ciertas personas enriquecerse primero
para llevar a todos a hacerse ricos juntos; proporcionar
a los habitantes tanto urbanos como rurales la garantía
social correspondiente a las circunstancias nacionales
de China y promover el desarrollo económico y la
estabilidad social.
En 1997, el Gobierno chino anunció que el sector
no público es un componente importante de la economía
socialista de China. Se estimula el capital, la tecnología
y otros elementos de la producción participar en
la distribución de la ganancia. Esto demuestra
que la reforma del sistema económico de China ha
dado un paso aún mayor.
En 2001, la reforma avanza de manera ordenada en los distintos
terrenos y consiguió notables resultados. En la
actualidad, la economía de mercado socialista en
China se está formando, la función básica
del mercado en la distribución de recursos se ha
fortalecido evidentemente y el sistema de regulación
y control macroeconómicos se ha formado en forma
preliminar; la modalidad de crecimiento de la economía
china se transforma del tipo extensivo en el intensivo.
Para 2010, China tendrá construido un sistema económico
de mercado socialista relativamente perfecto y lo convertirá
en uno relativamente maduro antes de 2020.
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