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INFORME SOBRE LA EJECUCIóN DEL PRESUPUESTO CENTRAL Y DE LOS PRESUPUESTOS LOCALES DEL 2001 Y SOBRE LOS PROYECTOS DE PRESUPUESTO CENTRAL Y DE PRESUPUESTOS LOCALES DEL 2002(II)
Continuó el reajuste de la política de distribución de los ingresos y se hicieron esfuerzos para solucionar el problema de los atrasos en el pago de salarios en las entidades de base. En los últimos años, el Estado ha introducido reajustes adecuados en la política de distribución de los ingresos, incrementando cada año los salarios del personal de los organismos administrativos e instituciones públicas y elevando el nivel de subsistencia garantizado a los beneficiarios de la seguridad social. En el proceso de la aplicación de las políticas de reajuste salarial se han observado también atrasos en el pago de los salarios de los cuadros y empleados de algunos distritos y cantones. Según estadísticas presentadas por las autoridades locales, hasta finales del 2001 se habían registrado para ese año impagos de los salarios establecidos por la política unificada del Estado por valor de 6.500 millones de yuanes en las diversas localidades, lo que representaba el 1,8% del total de los salarios que se debían pagar. Esto ocurrió principalmente en los niveles de distrito y cantón de las regiones centrales y occidentales. A juzgar por los recursos financieros generales de las localidades, los ingresos propios de las haciendas locales han experimentado en los últimos años un incremento relativamente rápido, alcanzando los 779.300 millones de yuanes en el año 2001, o sea, un aumento de 138.700 millones sobre el año precedente. Sin embargo, debido al desequilibrio existente en el aumento de los ingresos de las diversas localidades y en la transferencia de pagos provincial a niveles inferiores y, además, al aumento excesivamente rápido del personal sustentado por la Hacienda, aún es difícil que las haciendas de algunos distritos y cantones garanticen el pago oportuno e íntegro de los salarios, aunque las haciendas locales han hecho denodados esfuerzos por resolver el impago. En años recientes, la hacienda central ha incrementado en forma notable la transferencia de pagos a las haciendas locales. Del año 1998 al 2001, sus gastos por concepto de subsidio concedido a las haciendas locales subieron de 332.100 millones de yuanes a 601.500 millones, lo que supone un incremento anual del 21,9%, es decir, 5,2 puntos porcentuales más que el promedio anual del aumento de los gastos propios de la hacienda central. En el año 2001, a pesar de una considerable presión de gastos en diversos aspectos, la hacienda central asignó, tan sólo para los gastos de carácter salarial, 89.200 millones de yuanes como fondos destinados a la transferencia de pagos. Con el fin de aliviar las dificultades enfrentadas en el pago de salarios por los distritos y cantones de las zonas subdesarrolladas en el Centro y Oeste del país, la hacienda central corrió con la mayor parte o la totalidad de los gastos financieros necesarios para la aplicación en dichas zonas de la política de distribución de ingresos reajustada a partir de 1999. Excepto en las nueve provincias y municipios bajo jurisdicción central del litoral, la hacienda central se encargó de todos los gastos de otras 22 provincias, regiones autónomas y municipios bajo jurisdicción central para la aplicación de la política lanzada en octubre del 2001 para el aumento de los salarios del personal de los organismos administrativos e instituciones públicas. Al mismo tiempo, la hacienda central programó especialmente 5.000 millones de yuanes anuales como fondos presupuestarios disponibles para solucionar el problema de demoras en el pago salarial en determinadas temporadas del año en las grandes provincias agrícolas.
Gracias a los esfuerzos mancomunados de los gobiernos de diversas instancias, en el 2001 se alivió en cierto grado el problema de pagos atrasados en los distritos y cantones, y algunas provincias, además de asegurar que no se produjeran “nuevas demoras” en el año, fueron solucionando gradualmente las “demoras anteriores” al 2000. En el 2002, acentuaremos el trabajo para procurar una solución relativamente satisfactoria de todos los atrasos en el pago salarial del año en los distritos y cantones.
La inversión en la seguridad social siguió aumentando y el sistema al respecto fue perfeccionándose. En los últimos años, para poner en práctica la decisión de la dirección central, la hacienda central ha incrementado en gran medida los gastos en la seguridad social. En el año 2001, pagó 98.200 millones de yuanes en este concepto, cifra 5,18 veces la de 1998. De dicha suma, 34.900 millones correspondieron al subsidio al fondo de seguros de vejez; 13.600 millones al subsidio a la garantía de la subsistencia básica de los trabajadores desplazados de sus puestos laborales en las empresas estatales; 2.300 millones al subsidio a la garantía del nivel mínimo de vida de la población urbana; 31.000 millones a la complementación del fondo nacional de seguridad social; y 8.400 millones a las pensiones de invalidez y fallecimiento y al socorro y bienestar sociales. A la vez que se intensificaba la inversión en la seguridad social, se establecieron cuentas especiales de la Hacienda para los fondos de subsidio a la seguridad social, asegurando la utilización de éstos para los fines prefijados, y se dieron pasos activos y seguros para impulsar el ensayo de la reforma para el perfeccionamiento del sistema de seguridad social en Liaoning y otros lugares. Según estadísticas, hasta finales del 2001 más de 47 millones de beneficiarios de la seguridad social en todo el país habían recibido subsidios procedentes de los fondos previstos para esta prestación en el presupuesto estatal. Además, con el fin de eliminar la anticuada capacidad de producción y reducir la excesiva, apoyar el cierre y la quiebra de las empresas conforme a la ley y asegurar la colocación de los trabajadores y la estabilidad social, en el 2001 la hacienda central asignó 13.500 millones de yuanes como fondos de subsidio al cierre y quiebra de empresas.
Se incrementó en mayor medida la inversión en la agricultura y se logró la consolidación permanente de este sector como base de la economía. En el 2001, la hacienda central aumentó la inversión en la agricultura por múltiples canales. En primer lugar, con el fin de impulsar y perfeccionar el experimento piloto de la reforma de los impuestos y tarifas en las zonas rurales y reducir de raíz la carga de los campesinos, la hacienda central asignó 3.300 millones de yuanes como fondos destinados a la transferencia de pagos para apoyar el mencionado experimento piloto en toda la provincia de Anhui y 106 distritos de otras regiones. En segundo lugar, se aplicó a conciencia la política de exención total o parcial de impuestos sobre la agricultura en las zonas víctimas de calamidades naturales y mala cosecha; en todo el año, las zonas damnificadas fueron eximidas total o parcialmente del pago de impuestos sobre la agricultura por valor de 5.000 millones de yuanes, incluidos 4.000 millones de yuanes de subsidios concedidos por la hacienda central. En tercer lugar, se incrementó la inversión de ayuda a las zonas pobres; la hacienda central asignó 10.000 millones de yuanes para esta ayuda, mejorando en mayor medida las condiciones de producción y vida de la población pobre en las zonas rurales. En cuarto lugar, se designaron 4.200 millones de yuanes para dar apoyo a la reconversión en bosques de las tierras de uso agrícola y a la reforestación en colinas y terrenos baldíos aptos para ella, lo que promovió la mejora del entorno ecológico de las regiones occidentales y aumentó los ingresos de los campesinos. En quinto lugar, se incrementó la inversión en el programa de protección de bosques naturales, la explotación integral de la agricultura, la ciencia y tecnología agrícolas y la industrialización de las actividades agrícolas, para los cuales la hacienda central designó 23.300 millones de yuanes. En sexto lugar, se aplicó la política de manejo autárquico del fondo de riesgo en la producción cerealista, para apoyar la profundización de la reforma del sistema de circulación mercantil de granos y aumentar los ingresos de las principales zonas cerealícolas y las familias campesinas dedicadas exclusivamente a la producción agrícola. La hacienda central aumentó en 4.900 millones de yuanes los gastos en el manejo autárquico del fondo de riesgo en la producción cerealista para dichas zonas y concedió 17.300 millones de yuanes como subsidio al fondo local de riesgo en dicha producción, cifra que representó un 57% del monto total para el manejo autárquico.
Se incrementó en forma paulatina la inversión en la ciencia y la educación y se aplicó con eficacia la estrategia de vigorizar el país a través de ambos sectores. En el 2001, los gastos de la hacienda central para la educación alcanzaron los 21.300 millones de yuanes. Esta suma incluye 4.100 millones de yuanes como asignaciones para la educación aumentadas en el 2001 por la propia hacienda central según la exigencia de la dirección central de incrementar en un punto porcentual por año, conforme a un mismo método de cálculo, los gastos propios de la hacienda central en este concepto entre el año 1998 y el 2002; 1.000 millones de yuanes destinados a la puesta en práctica de la segunda etapa del “Programa estatal de educación obligatoria en las zonas pobres”, gracias a lo cual 32 distritos, municipios y distritos urbanos más aprobaron la verificación estatal del trabajo de generalizar, en lo básico, la educación obligatoria de nueve años y alfabetizar en lo fundamental a los jóvenes y adultos; y 2.600 millones de yuanes como subsidios especiales concedidos a las haciendas locales para la ejecución del “Programa nacional de reconstrucción de edificios en mal estado en las escuelas primarias y secundarias rurales”, que permitió reconstruir una superficie de 17 millones de metros cuadrados. En el 2001, los gastos de la hacienda central para la ciencia y tecnología llegaron a 37.300 millones de yuanes, un aumento del 29,5%. Esta cantidad comprende, como asignaciones especiales, 1.600 millones de yuanes para el fondo estatal de ciencias naturales, 600 millones para el plan estatal de investigación básica clave, 2.500 millones para el programa estatal “Marzo de 1986”, y 2.300 millones destinados al ensayo del programa de innovación intelectual de la Academia de Ciencias de China.
En términos generales, la ejecución del presupuesto del 2001 fue positiva. Sin embargo, tenemos plena conciencia de que subsisten algunos problemas en las operaciones fiscales que necesitan resolverse urgentemente. Además del desequilibrio entre los incrementos en los ingresos fiscales y de ciertas dificultades existentes en una parte de las haciendas distritales y cantonales, se mantiene la gravedad de fenómenos como la falta de reglamentación en la administración financiera, el relajamiento en la aplicación de la disciplina financiera y económica, el desorden financiero y tributario y la pérdida y despilfarro de fondos. Algunos de estos problemas se han ido acumulando por muchos años, y otros se deben a carencias en el cumplimiento de la reforma y nuestro trabajo. Prestaremos gran atención a estos problemas y adoptaremos medidas enérgicas para resolverlos a conciencia.
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