El país cuenta con 150 médicos y 240 camas por cada cien mil habitantes. En Beijing, Shanghai, Tianjin, Chongqing y otras ciudades grandes funcionan hospitales especializados y generales dedicados al tratamiento de tumores, enfermedades contagiosas y cardio-vasculares, a la oftalmología, a la odontología, a la medicina tradicional y, en las ciudades medianas de las provincias y regiones autónomas, hospitales integrales o especiales con instalaciones completas y modernas. La red de atención médica, prevención de enfermedades y protección sanitaria de nivel distrital, de cantón y pueblo cuenta ya con una determinada base en las amplias zonas rurales, con hospital central a nivel de distrito, clínicas de cantón y poblado y local médico en la aldea. Gracias a estos centros y a su constante perfeccionamiento, así como a la introducción gradual de buenas costumbres de higiene entre la población, las causas principales de muerte han dejado de ser las enfermedades con-tagiosas y parasitarias, sustituidas por los tumores malignos, las enfermedades vasculares cerebrales y cardíacas, acercándose al nivel de los países desarrollados en cuanto a las causas de muerte. La salud del pueblo ha mejorado considerablemente, y hoy la esperanza de vida es de 71,8 años, 5 años por encima de la media mundial.
“La profilaxis como medio principal” es una de las experiencias importantes del trabajo sanitario de China. Las divisiones administrativas a los diversos niveles del país han establecido centros sanitarios y antiepidémicos encargados de la supervisión y prevención de enfermedades, formando una eficaz red a escala nacional. Con el propósito de concentrar fuerzas para erradicar o controlar las enfermedades contagiosas y endémicas que amenazan seriamente la salud del pueblo, la Asamblea Popular Nacional y el gobierno chino promulgaron la Ley de Prevención y Tratamiento de Enfermedades Contagiosas, el Plan de Acción Nacional para la Erradicación de la Poliomielitis en 1995, el Programa para la Erradicación de las Enfermedades por Deficiencia de Yodo en 2000, junto con otras normas legales, todo lo cual ha contribuido a consolidar aún más el trabajo de profilaxis y tratamiento de las enfermedades, y obtuvo buenos resultados.
En mayo de 2003, el Consejo de Estado promulgó el Reglamento Correspondiente a los Acontecimientos Repentinos en la Salud Pública, lo que ha supuesto el establecimiento a nivel legal de mecanismos y sistemas para hacer frente a situaciones de emergencia provocadas por acontecimientos repentinos en la salud pública. El Estado invertirá enormes sumas de dinero para constituir un sistema de socorro y tratamiento para enfrentar los casos repentinos de la salud pública, consolidar y elevar la velocidad de reacción y la capacidad de respuesta de los centros de socorro y apoyo, los sistemas de rescate y tratamiento médicos y los sistemas administradores de informaciones de los hospitales ante acontecimientos repentinos. China continuará cooperando con la Organización Mundial de la Salud en este dominio.
Los servicios comunitarios que tienen como característica básica ofrecer a los vecinos prevención y tratamiento integrales de enfermedades, gracias a la reforma del sistema de atención médica y al establecimiento de comunidades en las ciudades en los últimos años, que antes sólo existían en algunas urbes, se han extendido a la mayoría de ellas, y son bien acogidos. Su desarrollo se ajusta a la urbanización, a la senilización poblacional, al cambio del diagrama de las enfermedades y a la modificación de los estratos sociales, proporcionando recetas efectivas para el mejoramiento de los servicios sanitarios. En las ciudades grandes y medianas se está formando una red que tiene como núcleo los centros comunitarios de servicio sanitario y como complemento las demás organizaciones básicas de atención médica.
En 2003, China comenzó a implantar en las zonas rurales un nuevo tipo de sistema cooperativo de asistencia médica, que se apoya en la recogida unificada de fondos para hacer frente a enfermedades graves. Los fondos se reúnen de la siguiente manera: los individuos pagan una parte, la colectividad ayuda y el gobierno subsidia. Si un campesino que se incorpora al sistema cae enfermo y precisa hospitalización, puede liquidar una determinada proporción de los gastos. Conforme al plan previsto, este sistema cubrirá todo el país en el año 2010. Mientras tanto, se ha decidido que en las zonas rurales se establezca y ejecute un régimen de socorro y ayuda médicos, que preste los respectivos servicios a los hogares campesinos con dificultades económicas en caso de enfermedades graves. Para fines de 2005, se habrá hecho realidad este sistema reglamentado y perfec-cionado, básicamente en todo el país. Los fondos necesarios en este dominio se reúnen por las vías de transferencia de la ha-cienda a diversos niveles, la donación voluntaria de los círculos sociales, etc. y se utilizan por temas exclusivos.