China condenó el estallido de bomba del viernes en Jerusalén, el cual causó un gran número de víctimas, y pidió a todas las partes involucradas que ejerzan la máxima moderación para impedir que la situación se deteriore.

La vocera del Ministerio de Asuntos Exteriores, Zhang Qiyue, dijo el día 11 que China siempre se opone a cualquier forma de acción terrorista dirigida contra civiles.

China ha reiterado en diversas ocasiones que las negociaciones de paz son la única forma de solucionar la disputa entre Palestina e Israel y que la aplicación firme del acuerdo de cese al fuego por las dos partes es una condición necesaria para disminuir la tensión en el Medio Oriente, agregó la vocera.

Ella indicó que China pide a todas las partes involucradas que ejerzan la máxima moderación para evitar el deterioro de la situación, y a que tomen medidas efectivas para reanudar las negociaciones tan pronto como sea posible.