México, Chile y Perú esperan fortalecer y consolidar su presencia en la Cumbre de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se celebrará aquí los próximos 20 y 21 de noviembre.
Las cumbres de APEC, a las cuales asisten potencias como Estados Unidos, Japón, Rusia y China, suponen una gran oportunidad para los líderes latinoamericanos de participar en foros del más alto nivel y exponer sus planteamientos de igual a igual a los líderes de las 21 economías más poderosas, según coincidieron hoy los analistas.
Chile ingresó al bloque en 1994, consciente de ser un país pequeño con 15 millones de habitantes y ubicado en el fin del mundo. El APEC apareció como la mejor forma para darse a conocer en la economía global, en especial con Asia y los países de Oceanía que, junto a Estados Unidos, son considerados los más dinámicos.
De acuerdo con analists locales, la reunión de Santiago permitirá a Chile promover su potencial, fortalecer las relaciones transpacíficas, destacar su liderazgo sudamericano en la promoción del libre comercio y demostrar su capacidad organizativa.
Los tres países que representarán a Iberoamérica en esta Cumbre de Líderes ingresaron al Foro en distintas fechas: México en 1991, Chile en 1994 y Perú, junto a Rusia y Vietnam, en 1998.
En la actualidad dichos países forman parte de las 21 economías líderes del mundo, las cuales representan 47 por ciento del comercio mundial y generan 57 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del planeta.
La reunión de Santiago será una nueva oportunidad para dejar de manifiesto la histórica y no oculta competencia que mantienen Chile, México y Perú por convertirse en la puerta de entrada de los productos asiáticos.
Para México, el APEC es una inversión a largo plazo que le permitirá una integración exitosa con las economías de la Cuenca del Pacífico, particularmente para estrechar relaciones con el este asiático.
El APEC contribuyó en México a mejorar su nivel de desarrollo y competitividad, a intensificar sus relaciones comerciales con la región y a incrementar la participación de las empresas mexicanas en los mercados de Asia Pacífico, y además generó nuevas asociaciones para la inversión y la tecnología.
Con 27 millones de habitantes Perú comenzó desde 1990 a mostrar un crecimiento económico y a liberalizar su mercado de forma creciente. En 1998 siguió el ejemplo de Chile e ingresó "al club de los países ricos y de los que se encaminan a serlo".
Desde entonces, su economía e industria se han situado entre las más competitivas de Iberoamérica gracias al empuje de su empresa privada y a su creciente incursión en las fuertes economías de la región Asia-Pacífico.
La posibilidad de un Tratado de Libre Comercio entre las 21 economías del APEC, propuesta por el Consejo de Empresarios del Foro, sería un gran avance para reducir las barreras arancelarias entre las pequeñas economías y los "colosos" del bloque, pero los analistas reconocen que será difícil lograr un consenso para avanzar en esta materia.
(19/11/2004)