La IV Reunión de Trabajo en el Tíbet que celebró el Comité Central del Partido y el Consejo de Estado en Beijing del 25 al 27 de junio definió la pauta a seguir por el trabajo en el Tíbet en los comienzos de este nuevo siglo. Es decir, la Teoría de Deng Xiaoping, la "triple representatividad" (El Partido Comunista de China debe representar los intereses fundamentales de las amplias masas populares, las fuerzas productivas avanzadas y la civilización avanzada) de Jiang Zemin y la continuación de la construcción económica como tarea principal. Debemos continuar desarrollando la economía y estabilizando la situación social, garantizar la seguridad nacional y la paz a largo plazo y la mejora de los niveles de vida de los ciudadanos de diferentes grupos étnicos en Tíbet.

En el verano de hace siete años, los líderes del Comité Central del PCCh celebraron la III Reunión de Trabajo en Tíbet en la cual formularon los principios que el trabajo en Tíbet había de seguir en el nuevo período histórico. En estos siete años, Tíbet ha sido testigo de un desarrollo económico acelerado, un progreso social amplio y una mejora firme de los niveles de vida de sus ciudadanos; se ha continuado fomentando la lucha contra el separatismo y la situación social y política ha permanecido estable; la política fundamental del trabajo en Tíbet en el nuevo período ha sido recibida con entusiasmo por el pueblo y el proceso de construcción del Partido se ha reforzado constantemente. Tíbet ha entrado en uno de los mejores períodos de desarrollo y estabilidad de la historia.

"Enfatizar el trabajo en Tíbet significa enfatizar el trabajo de los intereses globales; apoyar el trabajo en Tíbet significa apoyar el trabajo de la situación general".

El colectivo de líderes de la tercera generación con Jiang Zemin a la cabeza, heredando y llevando a cabo las tradiciones de la primera y segunda generación de líderes del Partido en el trabajo en Tíbet, anotaron, sin demora alguna, el tema de la estabilidad y desarrollo de Tíbet en la agenda. La III reunión señaló claramente que "el trabajo tibetano ocupa una posición estratégica importante en el trabajo global del Partido y del Estado pues la estabilidad de Tíbet afecta la estabilidad del Estado; el desarrollo y seguridad de Tíbet están estrechamente relacionados con el desarrollo y seguridad del Estado".

Después de analizar con profundidad las dificultades especiales y las condiciones favorables del desarrollo social y económico de Tíbet bajo una economía de mercado socialista, el Comité Central del PCCh estableció objetivos factibles de desarrollo y formuló las políticas preferenciales y medidas de ayuda para Tíbet en ocho aspectos: impuestos financieros, banca, inversión y fondos, subsidios, comercio exterior, seguridad social, reforma de empresas, agricultura y cría de animales. Los 62 "proyectos Daqing" ordenados por el Estado, los cuales ha recibido una inversión de 4,8 mil millones de yuanes, se han completado y puesto en funcionamiento.

Desde 1995, más de 40 ministerios y comisiones de las autoridades centrales y varias provincias, regiones autónomas y municipios bajo el gobierno central, especialmente las 15 provincias y ciudades que han ayudado de forma equivalente a Tíbet, han enviado consecutivamente 1.268 funcionarios destacados en dos grupos para trabajar en Tíbet, invertido cerca de 3,2 mil millones de yuanes de fondos y llevado a cabo 716 proyectos de ayuda que ahora han florecido y dado los primeros frutos.

"La estabilidad en Tíbet es el prerrequisito para garantizar el desarrollo sostenido de varias empresas tibetanas y la mejora gradual de los estándares de vida del pueblo. La estabilidad en Tíbet es de mucha importancia para la reforma, desarrollo y estabilidad del país". La inestabilidad de las raíces de Tíbet principalmente en la obstrucción y sabotaje de la camarilla del Dalai. Tíbet ha descubierto y criticado públicamente en toda la región los crímenes del Dalai Lama, capturado y confiscado los materiales de propaganda reaccionaria de la camarilla del Dalai y llevado a cabo la iniciativa de luchar contra el separatismo. El trabajo para conseguir una educación patriótica, una educación y publicidad del sistema legal y la restauración del orden normal en monasterios y templos se ha llevado a cabo en la región sin problemas, trabajo que ha hecho temblar los cimientos de la camarilla separatista del Dalai involucrados en tareas independentistas en la región. Ha frustrado las diferentes actividades y sabotajes separatistas organizados por la camarilla del Dalai como también la trama preparada por la camarilla del Dalai: tomar ventaja gracias a la reencarnación de Bainqen para echar por tierra Tíbet y confundir la religión, satisfaciendo así el gran evento budista.

Es de importancia especial reforzar el progreso cultural y ético y consolidar la posición ideológica y cultural en Tíbet. Tíbet continúa realizando una educación en toda la región basándose en cuatro perspectivas (la perspectiva marxista de la parte continental, nacionalidad, religión y cultura) y en dos teorías (materialismo y ateísmo) que pretenden eliminar el caos y la ignorancia.

Para conseguir estabilidad, paz a largo plazo y tranquilidad, es importante prestar atención a la construcción del Partido y de sus funcionarios. Un grupo de funcionarios profesionales y con integridad política ha sido asignado para reforzar los cuerpos líderes en todos los niveles.

"En todos los aspectos del desarrollo del Tíbet, es necesario proporcionar beneficios a los tibetanos, mejorar su vida material y cultural y promover la unidad y progreso étnico".

A causa de la limitación de condiciones naturales y de razones históricas, en los primeros diez años desde la introducción de la política de reforma y apertura, el espacio entre el nivel de desarrollo cultural y económico de Tíbet y el de las regiones desarrolladas costeras y del interior, en vez de reducirse, se agrandó. El Comité Central del Partido ha dado a este tema mucha importancia y en la III Reunión de Trabajo en Tíbet recalcó que este creciente espacio era perjudicial para buscar la prosperidad y bienestar económico comunes. El desarrollo es la clave para solucionar todos los problemas. Observando los hechos durante los últimos siete años, encontramos que las fuerzas productivas socialistas se han convertido en la principal melodía que se escucha en esta vasta tierra. Cualquier política o medida formulada por el Comité Central del Partido en Tíbet toma esto como punto de partida y como resultado final.

Los últimos siete años han sido testigos de un rápido crecimiento sostenido de la economía nacional. El año pasado, el producto interior bruto (PIB) de la región fue de 11,742 mil millones de yuanes, un incremento del 96,3 por ciento respecto a 1994, en que el promedio del incremento anual era de 11,9 por ciento. Se ha conseguido progreso político en el reajuste de la estructura industrial y se han desarrollado nuevos productos de calidad. Se ha realizado una mejora notable en la construcción de infraestructuras. Por ejemplo, se han completado y puesto en funcionamiento un aeropuerto, redes de suministro de energía, estaciones energéticas y proyectos pilotos.

Los últimos siete años han sido testigos de un rápido desarrollo de diferentes empresas sociales. Actualmente, la región posee 956 escuelas de varios tipos y de varios niveles, con un número de estudiantes de 381.500. También cabe decir que el índice de asistencia escolar ha alcanzado el 85,8 por ciento. La región también ha acogido un grupo de empresas y productos de alta tecnología, un gran paso hacia la industrialización de la ciencia y la tecnología, disciplinas que han ayudado a impulsar el crecimiento económico. También se han continuado desarrollando la cultura, salud pública, deportes y otros campos sociales.

Los últimos siete año han sido testigos de la mejora notable de los niveles de vida del pueblo. El año pasado, la producción de grano total de la región fue de 962.200 toneladas y la cría de ganado fue de 22,66 millones de cabezas, cifras que han ocasionado una cambio histórico de autosuficiencia básica en grano y aceite y carne comestible. El ingreso neto por cápita de los granjeros y pastores y el ingreso disponible por cápita de residentes urbanos alcanzaron 1.331 y 6.448 yuanes con incrementos respectivos de 62,9 y 93,6 con respecto a 1994. Los aparatos televisivos, neveras, lavadoras, sistemas de sonido y teléfonos han entrado a formar parte de las familias urbanas y rurales.

La IV Runión señaló: "Reforzando seriamente la construcción del Partido, promoviendo el avance de la economía de Tíbet desde el desarrollo acelerado al desarrollo creciente y el avance de la situación en la sociedad tibetana desde la estabilidad básica a la paz y tranquilidad a largo plazo". La reunión decidió construir 117 proyectos con inversiones estatales directas de 31,2 mil millones de yuanes. Durante el período del X Plan quinquenal, los departamentos financieros centrales apoyaron y subsidiaron Tíber con 37,9 mil millones de yuanes, doblando la cifra del IX Plan quinquenal y consiguiendo un crecimiento del PIB del 12 por ciento durante el X Plan quinquenal.

Los esfuerzos nacionales de ayuda al Tíbet se han intensificado. El Comité Central del Partido ha decidido extender el trabajo de ayuda de los 10 años originales a otros 10 años mientras amplia el alcance de la ayuda. Algunas empresas estatales se unirán al trabajo de ayuda en el Tíbet.

Mantener la estabilidad y desarrollo de Tíbet y salvaguardar la unión y seguridad de la parte continental es una tarea política importante del trabajo a realizar en Tíbet. La región autónoma ha afirmado claramente que no se dará ningún cambio en el estado del trabajo que mantiene la estabilidad en el nuevo siglo ni en las medidas políticas para mantener la estabilidad ni en las responsabilidades y tareas del Partido y organizaciones gubernamentales a todos los niveles. Al mismo tiempo, bajo "los tres representantes", reforzará seriamente la construcción ideológica y política para luchar contra el separatismo y prestará atención a la construcción organizativa enfocándose en las bases, particularmente en los pueblos. Esta es la voluntad de la República, el punto de vista de todos los ciudadanos incluyendo los diferentes grupos de minorías étnicas en Tíbet y que históricamente ha probado ser la pauta correcta para el trabajo tibetano en el nuevo período histórico que representa de forma fidedigna los intereses fundamentales de todos los grupos étnicos de Tíbet.

Estamos convencidos que "bajo el acérrimo liderazgo del Comité Central del Partido y la ayuda desinteresada de diferentes nacionalidades fraternales de la gran familia de la parte continental, el nuevo Tíbet civilizado, unido, próspero y socialista avanzará a grandes pasos en este viaje por el nuevo siglo.