Deng Xiaoping fue un líder excepcional, que jugó un papel decisivo en el nacimiento de la China moderna, recordó el ex primer ministro de Gran Bretaña, Edward Heath, quien mantuvo una "especial amistad" con el mandatario de más de dos décadas.

"Deng demostró al mundo como se podía gobernar un país y llevarlo a una rápida expansión, y cómo podía esta nación contribuir al desarrollo del mundo", declaró Heath, de 88 años de edad, en entrevista exclusiva con la Agencia de Noticias Xinhua en su residencia de Salisbury, sur de Inglaterra.

ESPECIAL AMISTAD ENTRE HEATH Y DENG

Heath visita China en 26 ocasiones, en 27 años, a partir de mayo de 1974, dos meses después que concluye su mandato de cuatro años como primer ministro. Fue durante su gobierno que Gran Bretaña establece relaciones diplomáticas con China (en 1972).

Heath recordó que "me reuní con Deng Xiaoping por primera vez en 1974, cuando me dio la bienvenida en el aeropuerto. En ese momento, le agradecía Deng por su cortesía".

"Cada reunión con él siempre era interesante para mí y creo que para él también", aseveró Heath con una sonrisa.

Las visitas de Heath a China a finales de la década de los 70, ayudaron a romper el hielo que había separado a China de Occidente durante décadas. En los años 80, sus periplos también desempeñaron un papel importante en las negociaciones de China y Gran Bretaña sobre la recuperación china de la soberanía en Hong Kong, según los especialistas.

Es en las conversaciones con Heath en Beijing, en abril de 1982, que Deng subraya los principios para resolver el problema de Hong Kong, impulsando notablemente las difíciles negociaciones entre los dos países.

La base de un país dos sistemas, propuesta por Deng, "es totalmente nueva y fue concebida especialmente para satisfacer las necesidades de Hong Kong y creo que puede funcionar perfectamente", aseveró Heath.

"El regreso pacífico y seguro de Hong Kong a China en 1997 fue un acontecimiento histórico y conmovedor" y la mejor solución para China, Gran Bretaña y Hong Kong, en particular, y para todo el mundo en general, añadió Heath. Heath sentenció que a través de todas sus reuniones e intercambios de correo, Deng le causó una gran impresión.

"Era de personalidad tranquila, pero intensa. Pensaba las cosas con anticipación y las explicaba inmediatamente. Nunva titubeó y por eso impresionaban", indicó el ex premier.

"Y tenía una visión mayor de China, una visión muy amplia, también de sus relaciones con otros países cuando introduce las políticas de reforma y apertura en 1978, añadió.

En sus memorias publicadas en 1998, Heath señala que " disfrutaba nuestras discusiones y me encontré con un Deng Xiaoping abierto y muy directo a la hora de exponer sus argumentos. Siempre se mostraba receptivo a lo que le decía, preparado para dar una respuesta directa a una pregunta directa, y siempre le gustaba añadir a nuestros debates una pizca de humor".

Heath se ha reunido personalmente con tres generaciones de líderes chinos. Sostuvo dos largas conversaciones con Mao Zedong en 1974 y 1975, muchas reuniones con Deng en tres décadas, y también se encontró con el entonces presidente chino, Jiang Zeming, en 1995.

Gracias a las reformas iniciadas por Deng y continuadas por sus sucesores, China ha protagonizado una transformación " absolutamente asombrosa", que se encuentra en pleno auge, y ha pasado a ejercer una mayor influencia en los asuntos internacionales, concluyó Heath.

(Xinhua)