Cuando el difunto líder chino, Deng Xiaoping, realizó su segundo viaje al sur de China hace 12 años, subió a la Torre Comercial de Shenzhen, de 150 metros de alto, y contempló el milagro del desarrollo bajo sus pies.
Cuando el difunto líder chino, Deng Xiaoping, realizó su segundo viaje al sur de China hace 12 años, subió a la Torre Comercial de Shenzhen, de 150 metros de alto, y contempló el milagro del desarrollo bajo sus pies.
Hoy día, la torre se ve más pequeña que entonces frente a los rascacielos que han crecido como hongos en la ciudad. Grandes cambios han tenido lugar en esta zona de prueba de la política de reforma y apertura de China desde la visita de Deng en 1992.
Durante el viaje, en el que Deng visitó Shenzhen, Zhuhai, Shanghai y otras ciudades chinas pioneras en la reforma económica, este líder chino declaró "el desarrollo es de gran importancia".
Doce años más tarde, la idea del rápido desarrollo económico ha sido bien acogida por los 1,300 millones de chinos, que han entendido que la reforma y apertura es el único camino para el desarrollo de China.
En vísperas del centenario del nacimiento de Deng, el 22 de agosto, Li Hao, que era el secretario del Comité Municipal de Shenzhen del Partido Comunista de China (PCCh) en 1992 y acompañó a Deng en su famosa visita al sur, dijo a Xinhua que sin Deng, China tendría que pasar mucho más tiempo para explorar las políticas de reforma y apertura así como para realizar un socialismo con características chinas.
En la primavera de 1973, cuando escuchó el informe de trabajo de la provincia de Guangdong, Deng Xiaoping señaló que en esta provincia se podría crear una zona económica especial para recoger experiencias sobre las reformas económicas de China.
Las palabras de Deng se hicieron en la realidad al año siguiente cuando China creó sus primeras cuatro zonas económicas especiales: Shenzhen, Zhuhai, Shantou y Xiamen. Estas cuatro ciudades abrieron una ventana de China al mundo exterior para atraer la atención del extranjero.
Deng mantuvo el gran interés en estas áreas de prueba y visitó el sur dos veces, una en 1984 y otra en 1992. Sus visitas determinaron la dirección del futuro desarrollo tanto para las cuatro ciudades como para todo el país.
Li recordó la segunda visita de Deng a Shenzhen y destacó que se fue contento de escuchar su informe sobre Shenzhen.
"Deng dijo que nunca había pensado que Shenzhen pudiera desarrollarse tan rápidamente, lo que le alentó para crear más zonas económicas especiales en China", agregó Li.
También añadió que durante su viaje, Deng reiteró que las zonas económicas especiales no eran el resultado del capitalismo, sino innovaciones del socialismo.
Tras la histórica visita de Deng al sur de China en 1992, el XIV congreso nacional del PCCh estableció la meta de crear una economía de mercado socialista en China, un paso importante que abandonaba la vieja economía planificada e impulsaba al país en una nueva etapa de desarrollo.
La "economía de mercado" se ha convertido en un término familiar para todos los chinos, y China se intenta materializar que cada día más países extranjeros reconozcan su estatus de economía de mercado.
En la actualidad, China continúa el milagro del crecimiento económico a lo largo del camino pavimentado por Deng. Durante los últimos 25 años, la economía de China ha mantenido una tasa de crecimiento del 9.4 por ciento, y ha creado un nuevo récord de crecimiento económico mundial.
En China se ha creado un proyecto de apertura en todos los aspectos que se extiende desde las ciudades costeras orientales como Shenzhen y Zhuhai hasta todo el país.
El delta del río de la Perla, que incluye Shenzhen y Zhuhai, se ha convertido en una de las áreas de desarrollo económico más rápido en China. La región meridional ha sido una de las bases de manufactura más importantes del mundo, mientras que China tiene otras dos regiones económicamente avanzadas, el delta del río Yangtse con su centro en Shanghai y el golfo de Bohai con su centro en Beijing.
A principios de los años 80, Deng dijo que el comercio exterior de China era sólo una parte mínima del comercio mundial en aquel entonces. Si el volumen comercial se cuadruplica, eso supone que las relaciones económicas de China con los países extranjeros mejorarán, apuntó Deng.
Hoy día, el volumen comercial de China se ha elevado de los 38, 100 millones de dólares USA en 1980 a los 851,200 millones de dólares USA en 2003, ocupando el cuarto puesto en el mundo, detrás de Estados Unidos, Alemania y Japón.
Durante la primera mitad de este año, China tuvo un comercio exterior de 523,000 millones de dólares USA, y los funcionarios del Ministerio de Comercio estimaron que el volumen total del comercio exterior excederá un billón de dólares USA en 2004.
China es una parte importante de la economía mundial, y los países extranjeros han mostrado su interés en el mercado de este país asiático.
De acuerdo con el punto de vista de Stephen S. Roach, primer economista de Morgan Stanley, China ha encontrado con éxito un camino para acelerar el desarrollo económico y que la economía de China se integra en la economía mundial, y ha jugado un importante papel en el proceso de la recuperación económica mundial.
"Debe desarrollarse más rápidamente", dijo Deng al terminar su famosa visita a Shenzhen en 1992. Hoy día, este mensaje resuena en toda China.