El Templo de Shaolin en la provincia central china de Henan, famoso por el arte marcial chino, ha solicitado el registro de marca en más de 80 países para proteger el auténtico "espíritu Shaolin".

Una encuesta realizada por la Oficina de Leyes de Marcas y Patentes de China ha descubierto que muchos países y regiones compiten por registrar sus propias marcas de Shaolin o Templo de Shaolin. Al menos 117 marcas ya se han registrado en 11 países y regiones.

"Estos templos de Shaolin no tienen nada que ver con el Templo de Shaolin en Songshan, provincia de Henan", indicó Shi Yanlu, técnico en jefe de artes marciales del Templo de Shaolin.

"No podemos representar el Kung-Fu de Shaolin cuando hacemos intercambios culturales en ultramar. De otro modo, el poseedor de la marca Kung-Fu de Shaolin local nos acusará de violación, a menos que consigamos su permiso", se quejó Shi Yongxin, abad del templo.

En China se usan 54 marcas que usan el nombre de Shaolin: desde hoteles, pasando por estofado de marisco, cerveza, coches, neumáticos, muebles, alambre hasta vino y cigarrillos, pero ninguna tiene relación con el Templo de Shaolin, informó la Administración Estatal de Industria y Comercio.

A fin de prevenir abusos de la marca "Shaolin", el Templo de Shaolin ha establecido la Corporación Ltd. del Desarrollo Industrial de Shaolin de Henan y ha registrado Shaolin y el Templo de Shaolin como marcas en las áreas no registradas. El templo ha presentado solicitudes a más de 80 países para el registro de la marca de Shaolin.

El templo se construyó en el año 496 en el período de las dinastías del Sur y del Norte (420-581). Al principio, el establecimiento se levantó para los monjes de la India, Bodhidharma, que vinieron a China para transmitir el budismo e introducir sus ejercicios. Los seguidores chinos lograron combinarlo con las típicas técnicas chinas e inventaron la única forma conocida como el arte marcial "wu shu".

(30/06/2004)