A mediados de julio, en el interior de Hoh Xil, o sea, por las regiones del río Zhuonai y del Taiyang, se fueron concentrando unas 300.000 antílopes hembras, y cerca de la mitad de ellas empezaron a parir. La Administración para la protección natural de categoría estatal envió agentes de protección a los mismos terrenos interiores de la región, iniciando la construcción de habitaciones seguras para el parto del animal.
Caijia, director de la Administración de Hoh Xil, explicó que “en la actualidad, el trabajo de mayor importancia en la región de protección radica en salvaguardar los antílopes en período de parto, previniendo y atacando los actos ilícitos de cazas, reduciendo al mínimo los asaltos por parte de enemigos naturales, y adoptando medidas efectivas de auxilio para con las crías heridas o desviadas. Las patrullas a mando de la Administración efectuarán, en la región de protección de Hoh Xil y en un lapso de medio mes, sus inspecciones al respecto, supervisando a distancia el proceso del parto del animal, lo que contribuirá a acumular datos y materiales a favor de la investigación sobre las leyes que rigen las emigraciones durante el período de parto de dicho animal. Según encuestas realizadas a las patrullas, las zonas que colindan con las tres provincias de Qinghai, Xinjiang y Tíbet se encuentran en una situación relativamente tranquila y estable, mientras que las regiones de protección de Qiangtang de Tíbet y las de la montaña Altun de Xinjiang, aún refuerzan su salvaguardia a tal efecto.
Según otras averiguaciones, una parte de los antílopes de Qiangtang y Altun se están dirigiendo al interior de las regiones de Hoh Xil para el parto; mientras que 2.000 animales de esta índole ya logran sobrepasar a salvo los terrenos de construcción del ferrocarril y de la carretera Qinghai-Tíbet.
Con anterioridad al 9 de julio, la Administración de Hoh Xil emprendió una campaña a gran escala por el aniquilamiento de los obstáculos en la expedición del animal. En la campaña, el Administración envió cuatro patrullas con 32 miembros equipados con ocho jeeps, que recorrerían una trayectoria de 5.500 kilómetros para su misión. En el curso de su inspección, las patrullas detuvieron en doce ocasiones a los automóviles para que cedieran el paso a los animales, prohibieron tomar fotos de los antílopes en marcha, repartieron y pegaron 100 copias del urgente “Aviso de prohibición estricta de los actos de perseguir, fotografiar los antílopes o de capturar las crías de las mismas”. Aún distribuyeron 3.000 octavillas de propaganda, a lo largo de los terrenos en construcción, en los barrios donde viven los pastores así como ante los comercios.
A fines de julio, los antílopes hembras regresarían con sus crías a las regiones de Hoh Xil. La Administración está dispuesto a mandar el grueso de fuerzas de la patrulla, con la misión de efectuar, junto con los puestos de protección e inspección, actividades para acabar con todo tipo de caza furtiva, perturbaciones y otros obstáculos por el estilo.
(CIIC)