El secretario del Gabinete de Japón, Yasuo Fukuda, prometió el jueves 17 considerar de manera sincera la reciente solicitud china en el sentido de que se revisen los polémicos libros de historia aprobados por el Gobierno japonés.

"No podemos hacer más que examinar cuidadosamente el contenido de la petición y tratarla sinceramente", dijo el alto funcionario japonés en una conferencia de prensa.

Sin embargo, Fukuda no explicó si Japón revisará nuevamente los libros ya autorizados para usarse en el nuevo año lectivo que se iniciará en abril de 2002.

Las autoridades chinas llamaron a un alto diplomático japonés a la cancillería, exigiendo a Japón que tome medidas efectivas para corregir los serios errores que aparecen en los libros de historia elaborados por algunos académicos derechistas de Japón.

Funcionarios de la cancillería china le expresaron al citado diplomático japonés que los libros de historia compilados por la Sociedad de Reforma de Manuales de Historia defienden el imperialismo y embellecen y niegan la historia de agresiones de Japón. Los funcionarios chinos también entregaron una lista de demandas de cambios en el contenido de dichos libros.

Los libros de historia han provocado fuertes protestas de Sudcorea, que acusa a Japón de haber tergiversado la historia de la ocupación japonesa de la Península Coreana.