El espíritu de “la vida es lo más importante” y “prevenir la lesión secundaria” que la Isla de bebés abandonados refleja, no sólo es una idea teórica, sino ha sido probado por las prácticas chinas y extranjeras durante largo tiempo. Como dijo Han Jinhong, director de la Casa Benéfica de Niños de Shijiazhuang: “no podemos cambiar la acción del abandono, pero si podemos cambiar el resultado del abandono”.

De hecho, podemos decir que cómo los padres están dispuestos a abandonar al niño si pueden encontrar otro remedio. Muchos niños abandonados sufren las enfermedades congénitas, y sus familias no pueden pagar los costes del tratamiento médico. Según las estadísticas, a medida del incremento de los ingresos y el perfeccionamiento del sistema de garantía social, estos años el número de los bebés abandonados ha registrado una tendencia a la baja.

Los padres de otros lugares acuden a Nanjing para “abandonar a sus hijos”, y en vez de significar que el establecimiento de la Isla en la ciudad es un error, esto demuestra que esta idea debe ser promovida a otras ciudades. En una rueda de prensa de la Oficina de Información del Consejo de Estado celebrada el 5 de diciembre, Dou Yupei, viceministro chino de Asuntos Civiles mencionó también el establecimiento de las Islas, diciendo que los eruditos y representantes de las organizaciones sociales han llegado a un acuerdo de divulgar la idea en todo el país.

Claro, éste no tiene el objetivo de facilitar el abandono, sino es para ser responsable por todas las vidas incondicionalmente. El Ministerio de Seguridad Pública combatirá enérgicamente, de acuerdo con la ley, contra las acciones irresponsables del abandono malicioso de los bebés

Es inevitable que en cierto periodo la fundación de la Isla traerá más presión de recibir y tratar los niños a las instituciones de bienestar social, las cuales requerirán de más apoyo financiero de la hacienda gubernamental y de las organizaciones benéficas no gubernamentales. Pero tenemos confianza sobre la humanidad básica y creemos que la gente no decidirá a abandonar sus bebés por el estímulo de las “condiciones seguras y cómodas”. La práctica de otros lugares también ha comprobado que el número de dichos bebés no aumentará considerablemente con el establecimiento de la Isla.

Es un fenómeno normal la “atracción” de más niños abandonados de la Isla en un corto periodo. Si se aplicará durante largo tiempo y en una cobertura más amplia, se mostrarán más evidentemente las influencias positivas de la Isla en la protección de los bebés.