(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Datos de un reciente informe del Centro de Investigación Científica Social de la Universidad de Pekín revelan que el 75,2 por ciento de los chinos casados no vive con sus padres y el 21,1 por ciento de las parejas que han pasado por el altar comparte hogar con los progenitores del chico, cantidad que supera en 5 veces las de las uniones que residen junto a los padres de la esposa.

Los detalles, recogidos en el documento “Información del Desarrollo de Medios de Subsistencia del Pueblo de China 2012”, fueron revelados durante la celebración del “Seminario de Persecución e Investigación del Desarrollo de Familias Chinas”, convocado por la Universidad de Beijing.

Según la investigación, el 62,3 de los chinos mayores de 16 años están casados y el 31,2 por ciento aún no se han decidido a pasar por el altar, mientras los solteros representan el 7 por ciento de la población adulta.

La proporción de casados y solteros es elevada, pero la de divorcios y convivencia no, lo que demuestra que la estabilidad del matrimonio chino es alta y la conciencia sobre el matrimonio tradicional continúa ocupando una posición predominante en China.

Los investigadores comprobaron también que el 13,2 por ciento de las parejas que tienen hijos mayores de edad viven solas en lo que se denomina “familia de nido vacío”. En tanto, un 2,4 por ciento de los matrimonios son “familias DINK” (sin hijos).

Aunque aún el número de hijos adultos que vive con sus padres es alto, las “familias de nido vacío” aumentan aceleradamente, un fenómeno que genera problemas como la falta de cuidado y afecto entre la población anciana.

También está cambiando la estructura generacional de las familias y cada vez son más comunes las familias en las que conviven dos generaciones. Pero cuatro generaciones solo es posible encontrar en el 1,9 por ciento de los casos.

En relación con los gastos, el estudio muestra que a la educación de los hijos se destina una media anual de 1.803,9 yuanes. Esa estadística es mucho mayor en la ciudad (3.458,2 yuanes) que en los pueblos (1.367,8 yuanes).

Los niños permanecen unas 6 horas por día en la escuela de lunes a viernes, y pasan otras 3 o 4 horas en centros de enseñanza los fines de semana. Los niños de 6 a 9 años eligen primero las clases de caligrafía y pintura, los de 10 a 12 años prefieren las de instrumentos musicales, y los de 13 a 15 años las de idiomas.

Un nuevo índice, añadido el año pasado, el de la red social, muestra que la proporción de utilización del programa de mensajería instantánea QQ supera el 90 por ciento entre todas edades y zonas de los jóvenes. La red social y el correo electrónico son las vías más extendidas para la comunicación, y la función de Internet que más se utiliza es la de escuchar música. No obstante, la televisión es la actividad más popular entre los jóvenes.

El informe analiza igualmente la forma en que se trata a los niños enfermos. El 36,8 por ciento de los padres chinos no acude al médico cuando sus hijos enferman, sino que compran el medicamento que consideran conveniente y se lo suministran ellos mismos. Ese porcentaje es un 10 por ciento mayor en las ciudades que en el campo.

Los especialistas consideran que, excepto por los elevados gastos del médico en la ciudad, el conocimiento de los padres es muy importante también. Según las estadísticas, el 60,7 por ciento de niños chinos tiene seguro médico, pero solo el 17,7 por ciento de ellos tiene seguridad de médica comercial.

Otros datos de interés arrojados por la investigación son que el 6,1 por ciento de los niños chinos son gordos y el 7,4 por ciento presenta sobrepeso. Por edades, los más pequeños presentan más cantidad de tejido adiposo subcutáneo, y por sexo, son más los chicos con este problema que las chicas. Y geográficamente, hay más niños obesos en el oeste que en el centro y este del país.