Sang Zixuan tiene 7 años y su hermano Sang Ziheng sólo 6. Sin embargo, parecen ancianos.

Los niños sufren de una extraña enfermedad de envejecimiento precoz, conocida como progeria, que, según su abuelo Sang Fayu, ninguno de los médicos que visitaron a su familia en un pueblo del condado de Luyi en la provincia de Henan pudieron diagnosticar o tratar.

Ambos parecían niños normales en su primer año. Sang Zixuan era gordito y saludable cuando nació, y Sang Ziheng podía hablar unas pocas palabras simples para cuando cumplió su primer año de edad.

Pero durante el segundo año, las cosas cambiaron. Los niños desarrollaron enfermedades en la piel, sus huesos se debilitaron y perdieron la capacidad de hablar.

La familia llevó a los niños a muchas agencias médicas en todo el país, incluyendo algunos de los hospitales más avanzados en Henan y la provincia nororiental china de Heilongjiang, pero ninguno pudo tratar la enfermedad rara.

"Los médicos sólo les dieron a mis nietos algunos controles físicos, y no pudieron prescribir ningún medicamento para los síntomas," dijo Sang a China Daily. En busca de un tratamiento médico, los padres de los niños han gastado casi 600.000 yuanes (95.000 dólares), en su mayoría prestados de familiares, después de que sus ahorros se agotaron.

Sus padres comenzaron a trabajar recientemente en una obra en construcción en Tianjin con el fin de pagar los gastos médicos, mientras que los niños viven con sus abuelos.

Sang Fayu dijo a medios locales la semana pasada que la familia está dispuesta a enviar a cualquiera de los niños a participar en ensayos clínicos de medicamentos en cualquier hospital o centro que quiera investigar la progeria, con la esperanza de desarrollar una cura o tratamiento efectivo.

Ha habido otros casos de envejecimiento prematuro reportados en China.

El hijo y la hija de una pareja en la provincia de Anhui fueron diagnosticados con progeria cuando tenían un año de edad, y murieron cuando tenían 15 y 17, según un informe de 1986 en Salud China Ilustrada, una revista patrocinada por el Ministerio de Salud.

Se cree que la progeria podría haber sido una consecuencia de que los padres son parientes de sangre.

Sin embargo, el abuelo Sang Fayu dijo que su hijo y su nuera no estaban relacionados por la sangre y se discute que la progeria es una condición hereditaria.

También se han registrado casos de esta enfermedad en otros países. Okines Hayley, una chica de 14 años de edad en el Reino Unido, se mantiene activa y con buen humor, y escribió su autobiografía, Vieja antes de mi tiempo, el año pasado.

Otro caso es el de Seth Cook, del estado de Washington en los Estados Unidos, quien murió en su casa a los 13 años de edad, a causa de un ataque al corazón en 2007.

La Progeria Research Foundation, una organización sin fines de lucro fundada en 1999 se dedica a la búsqueda de tratamientos y una cura. En su página web sostiene que hay registros de 89 niños que viven con el trastorno de envejecimiento precoz en 39 países.

（Pueblo en línea)