Halloween o la Noche de Brujas es una fiesta que se celebra principalmente en algunos países occidentales, tales como Estados Unidos, el norte de México y algunas provincias de Canadá en la noche del 31 de octubre. Tiene origen en la festividad celta del Samhain y la festividad cristiana del Día de Todos los Santos. Debido a la forma de celebración, también se llama la “fiesta de los fantasmas”. Ahora en China, algunas personas, sobre todo los jóvenes también disfrutan mucho en esta fiesta, disfrazándose de demonios, vampiros, brujas... Con la promoción comercial, el ambiente de la fiesta en China ya está en efervescencia. Aunque sólo es una forma de ocio, ha provocado mucha discusión en un país que respeta y mantiene la distancia con los dioses y fantasmas.

¿Por qué hay discusión sobre Halloween?

En años recientes, las fiestas extranjeras (principalmente las propias de la cultura anglosajona) han sido muy bien recibidas en China. La Navidad, el Día de San Valentín han ocupado puestos muy importantes en la celebración de las fiestas en China. Con la llegada del Halloween, aunque muchos jóvenes disfrutan mucho en la fiesta con la locura, la desaprensión y los gritos, todavía parece un poco extraño cuando un gran número de gente celebra una fiesta cuyo origen ignora y de la que sólo conoce la forma superficial.

Huang Yuan, principal investigador de la Academia Zhongni de Administración Humana Occidental y Oriental de Hong Kong, explica que Halloween tiene su origen en una festividad céltica conocida como Samhain, que deriva del irlandés antiguo y significa “fin del verano”. Los antiguos celtas creían que la línea que une este mundo con el Otro Mundo se estrechaba con la llegada del Samhain el día 31 de octubre, permitiendo a los espíritus (tanto benévolos como malévolos) atravesarla. Los ancestros familiares eran invitados y homenajeados mientras que los espíritus dañinos eran alejados. Se cree que el uso de trajes y máscaras se debe a la necesidad de ahuyentar a los espíritus malignos. Su propósito era adoptar la apariencia de un espíritu maligno para evitar ser dañado. En Escocia, los espíritus fueron suplantados por hombres jóvenes vestidos de blanco con máscaras o la cara pintada de negro. Con el transcurso del tiempo, Halloween se ha convertido en una fiesta con sentido de felicidad, y las originales imágenes espeluzantes en las más adorables e interesantes. En este día, uno puede disfrazarse de cualquier personaje que te guste, y esa es justamente la razón de que a tanta gente les encante tanto Halloween.

Liu Xiangnin, doctor de estudios de Religión de la Universidad de Sichuan, dijo: “No todas las formas de entretenimiento de la cultura estadounidense pueden copiarse en China, donde los fantasmas son considerados como un tabú y el tema de la muerte no se trata mucho en la vida coditiana. Los chinos todavía no se han acostumbrado a bromear con las fantasmas, que son sagrados y misteriosos en su cultura, por no hablar ya de disfrazarse como uno de ellos. Al contrario, en la cultura occidental –según Liu- vivir y morir son sólo unas reglas de naturareza que no causan temor. La fiesta de los Santos o de los fantasmas es digna de celebración. Para no dar miedo a los niños, aumentar el ambiente de fiesta y hacerla más interesante, incluso los ancianos mayores de 60 años de edad también se disfrazan de fantasmas para divertirse en la fiesta. Las diferencias culturales causa la discusión sobre este tema. Incluso para los chinos que viven en el extranjero, la mayoría insiste en que en el proceso de asimilación de la cultura local, las huellas marcadas en los chinos por la cultura tradicional no desaparecen nunca. Confucio dijo: “Ofrendar a los espíritus que no son tus antepasados es una adulación ignominiosa”. Pero la esencia es que los fantasmas son dos cosas totalmente distintas en la cultura occidental estadounidense y la cultura china. Por ello algunos chinos tienen discusión sobre el comportamiento y las celebraciones de Halloween en China.