Warren Buffett, considerado como el maestro de las inversiones, y Bill Gates, el hombre más rico de Estados Unidos, han iniciado recientemente una campaña filantrópica. Juntos intentan persuadir a los millonarios de todo el mundo para que donen la mitad de sus propiedades para causas de beneficencia.
Actualmente unos 40 millonarios estadounidenses han respondido a la campaña, sin embargo, los chinos ricos no parecen estar muy dispuestos a colaborar.
A mediados del pasado junio, el estadounidense más rico, Bill Gates, y Warren Buffett, hicieron en el país norteamericano un compromiso de donación. Invitaron a los individuos y familias ricas del país a donar la mitad de sus propiedades para la beneficencia. Pese a que, en principio, el compromiso verbal no tiene efectos legales, sí que se trata de un compromiso moral.
40 millonarios estadounidenses responden a la iniciativa
Posteriormente Buffett y Gates persuadieron personalmente a 400 millonarios estadounidenses de la lista de Forbes. Buffett afirmó que hasta el pasado 4 de agosto, habían llamado a casi 80 personas en la lista y habían logrado ciertos éxitos. 40 millonarios o familias cuyas propiedades superan mil millones de dólares, se habían comprometido a donar la mitad de sus fondos.
La ambición de Buffett y Gates no se limita a su propio país. Durante una rueda de prensa celebrada al marco del Foro Económico Mundial, en Davos (Suiza), Gates anunció que llevaría su plan a China. Por su parte, Buffett, al ser entrevistado por The Wall Street Journal, señaló que viajarían a China a finales del próximo septiembre.
Posible reunión con Wang Chuanfu
¿Quien será el primer objetivo a persuadir? De acuerdo con Jason Hanke, portavoz de la Fundación Bill & Melinda Gates, todavía no se han determinado los detalles de la visita de Buffett y Gates a China, y están discutiendo las personas con quienes van a encontrarse. Aunque no hay un objeto oficial, los especialistas del sector dijeron que los posibles visitados serán los empresarios que han tenido negocios con Buffett o sus socios. Wang Chuanfu, gerente general de la compañía automovilística china BYD, quien también se lleva muy bien con el millonario estadounidense, sería la primera opción.
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