Al menos nueve personas murieron y otras 25 resultaron heridas en una explosión, al parecer premeditada, que se registró en la central provincia china de Hunan, informaron ayer las autoridades locales.

El estallido tuvo lugar a las 19:15 hora local del domingo en un restaurante del poblado de Wenjiashi, de la ciudad de Liuyang, cuando más de 30 personas estaban cenando, según la policía.

Las investigaciones preliminares muestran que los comensales fueron invitados por un aldeano de Wenjiashi, el cual había tenido disputas con ellos por razones familiares.

El sospechoso, cuya identidad no fue revelada, supuestamente les había llevado al restaurante para ofrecer excusas, reveló un portavoz de la policía.

Sin embargo, las autoridades creen que la explosión habría sido planificada, y el portavoz sostuvo que el suceso está siendo tratado como un caso criminal.

Los heridos están en condición estable en el hospital, añadió.

La policía se abstuvo de dar más detalles, y prohibió el ingreso de periodistas al lugar de la explosión.

El vocero de las autoridades dijo que la investigación seguirá adelante.

(18/09/2007, Agencia de Xinhua)