Un empleado de un parque de la sureña provincia china de Guangdong fue atacado el domingo por un león que, junto con un tigre, había escapado de un circo y deambulado durante más de tres horas por los terrenos del escenario natural, informó ayer uno de los directivos del parque.

El tigre, "más sensato y dócil", y al parecer considerando que ya había causado suficientes problemas, decidió regresar a su jaula por su propia cuenta a eso de las 10:00 de la noche del mismo día.

Por el contrario, el león se enfureció y atacó a Xu Zhaobin, empleado del parque, que se lo encontró de repente, dijo Lu Weijian, administrador de Yinxian, un centro de vacaciones ubicado en la ciudad de Dongguan, en Guandong, y el cual cuenta con un parque de gran extensión, hoteles, y un circo.

La policía disparó y dio muerte al león para evitar que causara más víctimas, dijo Lu.

El trabajador herido, de apellido Xu, con 20 años y oriundo de la provicnia central de Henan, se negó a recibir a los periodistas que buscaban sus declaraciones en el Hospital Changping, adonde fue ingresado en la noche del domingo.

Doctores del citado centro médico, que solicitaron mantenerse en el anonimato, dijeron que Xu sufrió varias laceraciones en la espalda, pero que su vida no corría peligro.

Su jefe, Lu, dijo que el trauma sicológico (de Xu) era más serio que el físico.

Los animales pertenecían al Circo de Wuqiao, con sede en la norteña provincia de Hebei, y que actualmente realiza presentaciones en dicho centro, precisó el administrador.

El escape se produjo alrededor de las 7:00 p.m. de ayer, cuando su cuidador les llevó un gran recipiente lleno de carne. " Generalmente la comida se les sirve a través de los barrotes de las jaulas, pero en esta ocasión el recipiente era demasiado grande y no cupo por allí", explicó.

Las dos fieras corrieron hacia su libertad en el momento en que vieron abrir la puerta.

Los administradores del centro vacacional evacuaron inmediatamente a todos los visitantes e informaron a la policía. Docenas de trabajadores, armados de palos y varillas, decidieron ir tras los animales.

"Estuvieron dando vueltas por el parque durante más de tres horas antes de venir aquí", dijo un guardia de seguridad, señalando un lago artificial cercano a la puerta principal. Y añadió que "si no los hubieran detenido a tiempo hubieran salido del ccentro y causado más caos".

La administración local de silvicultura suspendió las presentaciones del circo en el centro, en las cuales también participaban dos osos negros.

China ha presenciado en los últimos meses varios incidentes protagonizados por animales salvajes. La tragedia más reciente se registró en mayo pasado en la meridional isla de Hainan, cuando un ciudadano tailandés de 42 años, empleado de un zoológico local, fue mordido en el cuello y la pierna mientras aseaba la jaula de un tigre. El felino saltó sobre la víctima cuando ésta se inclinó para recoger una escoba. El hombre llevaba ocho años cuidando al animal.

Tres meses antes, otro tigre se abalanzó sobre una niña de seis años que se preparaba para que le tomaran una fotografía con él en un zoológico en el suroeste del país. La infante murió víctima de las heridas recibidas en la cabeza durante el ataque.

Finalmente, en abril, varios cocodrilos devoraron a un niño de nueve años quien, acompañado por tres compañeros de clase, había saltado la cerca de un parque que había sido cerrado meses atrás, y molestado a los reptiles con palos y piedras.

(04/07/2007, Agencia de Xinhua)