Por primera vez en la historia de China, un cohete portador desarrollado por una empresa privada china puso con éxito dos satélites en órbita desde el Centro de Lanzamiento de Satélites Jiuquan en el noroeste del país a las 13:00 de hoy jueves.
El SQX-1 Y1, un pequeño cohete portador comercial de cuatro etapas, lo fabricó i-Space, un desarrollador privado con sede en Beijing.
El cuerpo del cohete tiene un diámetro máximo de 1,4 metros, 20,8 metros de longitud y un peso al despegue de 31 toneladas, y puede enviar hasta 260 kilogramos de carga a una órbita sincrónica al sol a una altitud de 500 kilómetros.