Científicos chinos han modificado genéticamente a las reses para producir leche con las mismas propiedades nutricionales que la leche materna.

Los investigadores, según la publicación Public Library of Science One, afirman haber creado con éxito vacas que producen lysozyme – una proteína humana – mediante la implantación genética de embriones modificados en reses sustitutas. La lysozyme se encuentra en la leche materna y contribuye a incrementar la inmunidad de los bebés.

“El sabor de la leche es más fuerte que el de la leche común”, afirmó el profesor Li Ning, investigador principal y director de los Laboratorios Estatales Claves para la Agrobiotecnología de la Universidad de la Agricultura de China, quien piensa que la investigación tiene un gran potencial de beneficio para la salud humana.

Los científicos consideran que la leche de este rebaño de 300 vacas puede ser una alternativa para leche materna y las fórmulas lácteas para bebés.

“Esperamos comercializar algunos estudios en este campo en los próximos tres años. Pero para que leche como la humana llegue a las tazas de los consumidores pudieran ser necesarios quizás 10 años”, precisó.

“Hasta ahora la leche producida por las vacas GM es similar a la leche materna en apenas un 70-80 por ciento, falta una proteína especial que ayuda a los niños a aumentar su inteligencia”, señaló el profesor Li.