Por mucho tiempo, ha sido un misterio cómo Leonardo da Vinci creó esas sutiles sombras y luces en la Mona Lisa. Recientemente los científicos han descubierto el secreto utilizando los rayos X. Aunque se sabe que Da Vinci utilizó una técnica de pintura renacentista conocida como “sfumato”, no se conocían hasta ahora los entresijos de la misma. Según el análisis detallado que han realizado los especialistas de los colores y componentes de las distintas capas en la cara de la Mona Lisa se desprende que la obra tiene 40 capas de micrómetros de colores, cada una de las cuales sólo mide 2 milímetros, es decir, aproximadamente la mitad de un cabello humano. Los pigmentos tienen muy pocas diferencias, provocando el esfumado y las sombras de la boca que hacen pensar que la Mona Lisa está riéndose, mientras que sin embargo si se observa cuidadosamente, su sonrisa desaparece. Debido a que no hay marcas de pincel en la pintura, los científicos creen que da Vinci pintaba con los dedos. Pilliip Walter, director del equipo de investigación, dijo que las capas de micrómetros son el punto clave de la pintura, que demuestra la habilidad de da Vinci. Además, cada capa del colorante necesita meses para secarse al viento, por lo que se estima que la obra tardó varios años en completarse. |