Los ciudadanos chinos pronto tendrán la oportunidad de probar, literalmente, la vida de los astronautas, cuando algunos de los alimentos diseñados para los viajeros espaciales del país lleguen a los supermercados.
El Centro de Investigación Científica y Entrenamiento para los Astronautas Chinos y una compañía productora de alimentos de la oriental ciudad de Shanghai, han desarrollado chocolates y postres para "taikonautas" (denominación dada a los astronautas chinos con base en la pronunciación de la palabra "espacio" en mandarín), con el fin de comercializarlos, dijo hoy Chen Bin, director de la división de salud y nutrición del Centro.
Los productos llegarán a los estantes a finales de este año.
"Los alimentos también se incluirán en el menú de los tripulantes del próximo vuelo del Shenzhou VII, la tercera misión tripulada de China, en 2008", aseguró Chen, quien se llama a sí mismo "el chef espacial".
El organismo ha desarrollado más de 60 platos, entre los que se cuentan comidas corrientes, combinaciones de carnes y vegetales, y frutas y postres. Su cooperación con las compañías alimentarias para la producción en masa empezó en 2006.
"Siguiendo nuestra tecnología y estándares de calidad, las empresas producen los alimentos en sus fábricas con sus propios equipos. La producción es supervisada por nuestros nutricionistas", explicó Chen.
El experto dijo tener plena confianza en el éxito comercial de la comida espacial, que reúne los más altos parámetros de calidad y nutrición, y además es fácil de transportar.
La comida que ingirieron diariamente los tres primeros astronautas chinos durante las misiones de 2003 y 2005 pesaba alrededor de 1,75 kilos incluyendo el empaque, menos de dos tercios del promedio del peso de los alimentos que debe consumir un adulto cada día en condiciones normales, pero suficiente para proveer 2.400 calorías de la energía requerida por un viajero espacial.
"Este tipo de productos es perfecto para actividades exteriores extremas, como expediciones a los polos, montañismo, o simplemente viajes", dijo Chen.
"El chef espacial" dijo que el Centro ha adoptado una serie de estrictos criterios en la selección de los ingredientes y su procesamiento para garantizar la seguridad de los productos, que será otro "gancho" ante los consumidores, luego de una reciente serie de escándalos relacionados con los alimentos.
"Por ejemplo, exigimos que el aire en las fábricas donde se elaboran estos productos sea tan limpio como el de aquellos donde se fabrican productos farmacéuticos", aseguró.
Chen y sus colegas desarrollaron varias nuevas recetas y trabajaron en la mejora de los sabores. Entre las adiciones más recientes al menú de los taikonautas se cuentan el cerdo asado, el cocido de pechuga de pato, tortas rellenas similares a las que se consumen durante el Festival del Medio Otoño (Tortas de la Luna), y pasabocas de melón congelado.
"Los astronautas no son exigentes en cuanto a los sabores, pero la mayoría de ellos prefiere las comidas picantes, que consideran más apetitosa luego de los duros entrenamientos a los que deben someterse. Por eso es probable que la comida de (la suroccidental provincia de) Sichuan (famosa en todo el país por su alto contenido de picante) se haga a un puesto de privilegio en el menú ", concluyó Chen.
(25/07/2007, Agencia de Xinhua)
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