La planeada línea férrea del tren de levitación magnética (maglev en inglés) Shanghai-Hangzhou que tiene a los habitantes cercanos a ella preocupados por la contaminación de radiación magnética, será evaluada por la agencia estatal de ambiente, informó aquí ayer un alto funcionario.

"El proyecto impacta a los intereses directos de la gente que vive a lo largo de la ruta y algunos residentes, académicos y organizaciones han estado cuestionando (su impacto ambiental)", comentó Zhang Lijun, subjefe de la Administración Estatal de Protección Ambiental (SEPA), durante una entrevista en línea en la página web del gobierno central de China.

Indicó que la SEPA ha recibido un informe de evaluación ambiental del proyecto de parte de los contratistas y que invitará a los expertos a evaluar el impacto ambiental del proyecto.

El funcionario manifestó que la SEPA tomará su decisión con base en una evaluación científica tras estudiar por completo las opiniones de los expertos y el público.

Aprobado por el gobierno central en marzo del 2006, el proyecto de la vía de maglev Shanghai-Hangzhou de 175 kms. se calcula que costará 35.000 millones de yuanes (4.500 millones de dólares USA). Los trenes podrán alcanzar una velocidad de 450 kms. por hora.

Según los diseñadores del proyecto, la ruta de maglev irá hacia el suroeste desde la estación de maglev existente en el centro financiero de Shanghai. Luego pasará por la sede del centro de exposiciones Shanghai World Expo y cruzará el río Hangpu hasta la Estación de Trenes Sureña de Shanghai.

Desde ahí se supone que se construirá una vía doble junto a la ruta norte que lleva al Aeropuerto Internacional Hongqiao y la ruta sur que enlaza a Jaxing con Hangzhou, la cual sigue a la autopista Shanghai- Hangzhou.

(14/06/2007, Agencia de Xinhua)