La Acción N.° 1 en la reserva
natural de la montaña Altun de Xinjing ha comprobado que se había
disminuido la cantidad de los antílopes en comparación con el año
1999.
Del 5 al 16 de noviembre de pasado,
la Región Autónoma Uigur de Xinjing desplegó la Acción N.° 1 como
punto clave en la reserva natural de la montaña Altun, donde
frecuentan más los cazadores. Durante toda la acción, se han
detenido 76 criminales, descubierto 2 pieles y 5 cabezas de gamuza,
y detenido 3 sospechosos de crimen. Periodistas de la Televisión
Central de China (CCTV) y de la Agencia de Noticias Xinhua
entraron, junto con el equipo de acción, en el interior de la zona
de protección de la montaña Altun.
La zona de protección como un patio
sin muros
Una de las impresiones más profundas
de los periodistas de CCTV que han entrado por primera vez en la
reserva fue lo extenso que es la zona. En ésta, con una superficie
total de 45.000 kilómetros cuadrados, están distribuidas tres
extensas praderas alpinas, varios lagos salados alpinos y un
desierto alpino de 1.000 kilómetros cuadrados. Exactamente por lo
extenso y lo complejo de su topografía, el trabajo de protección se
enfrenta con extremas dificultades. Un periodista de CCTV que acaba
de volver de allí así lo describe: “toda la zona de protección es
como un gran patio sin muros, si no se aplican medidas enérgicas,
será difícil imaginar que no se pierdan algunas cosas”.
Delante del “hotel” hay restos de
animales salvajes por todas partes
Los periodistas descubren que los
cazadores, al entrar en la zona de protección, no solamente causan
daño a los antílopes, sino a todos los animales que se encuentran
allí. Ellos no traen alimentos o sólo llevan un poco de arroz o
harina de trigo, y la mayoría de sus alimentos proceden del mismo
lugar: comen lo que alcancen a cazar. En cuanto a los animales
salvajes cazados, la carne sirve para comer, mientras la piel es
para vender. Muchos cazadores permanecen varios meses en la zona,
causando mucho daño a los animales. En la tienda de un cazador que
ha estado dos meses en la zona se han descubierto restos de una
gamuza. Y en un restaurante abierto exclusivamente en una zona
deshabitada descubrieron también piernas de la gamuza y colas de
yac silvestre, y delante del restaurante están por todas partes
patas, huesos y cuernos de gamuza. El dueño confesó que este
“restaurante” de venta de caza se estableció hace dos años, y su
negocio principal está en ofrecer comida y alojamiento a los
cazadores y explotadores de oro ilegales que han entrado en esta
zona. Los alimentos suministrados son gran cantidad de animales
salvajes cazados.
Mucho frío en el saco de dormir
Según la presentación de un
periodista de CCTV, ahora en la zona de protección ya no se
encuentran grupos armados de cazadores de unas decenas o cien
personas como solía ocurrir en el año 1999, y relativamente ya no
es muy evidente su amenaza. La mayor amenaza para los soldados
proviene de la naturaleza. En una altura promedia de 4.500 metros,
consiste un problema clave para los que vienen por primera vez la
falta de oxígeno, y esto es, en especial, una prueba para los que
no tienen experiencias en las mesetas. Son muy comunes los
fenómenos de mareo, sofocación y vómito. Además, la temperatura en
invierno en la montaña Altun desciende a -10ºC por la noche, y se
siente mucho frío en el saco de dormir. Las malas condiciones
naturales debilitan la salud de la gente, y será muy peligroso si
se enfrentan con los cazadores armados, ya acostumbrados a este
clima.
(CIIC)