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spanish.china.org.cn | 07. 11. 2025 | Editor:Teresa Zheng [A A A]

XPENG: El robot «IRON» no es un humano

Palabras clave: XPENG, robot
Spanish.china.org.cn | 07. 11. 2025

El fabricante chino de vehículos eléctricos XPENG presentó su robot humanoide de nueva generación «IRON» en su Tech Day 2025 el miércoles, cautivando al público con su aspecto realista y elegancia felina. El acto desató rápidamente un intenso debate entre los internautas chinos e internacionales, lo que llevó a la empresa a publicar un video el jueves por la mañana para demostrar que no había una persona dentro.

Tras darse a conocer las imágenes del robot en las redes sociales, los usuarios extranjeros en YouTube quedaron maravillados por su realismo, y algunos comentaron: «Es increíble cómo encaja todo en ese traje» y «Sin duda, el andar más humano que existe». Sin embargo, otros mostraron cautela, y uno de ellos escribió: «Lo creeré cuando las reseñas confirmen que no es operado por control remoto; hasta entonces, soy escéptico». Del mismo modo, los internautas chinos señalaron en la publicación del director ejecutivo de XPENG, He Xiaopeng, en Douyin que la figura parecía tan real que les costaba creer que se tratara de un robot y no de un ser humano.

Para disipar las especulaciones de que el modelo era una persona real, He Xiaopeng publicó un video en Douyin en el que explicaba los detalles del diseño, compartido también con Global Times el jueves temprano. En las imágenes, dijo: «Si ayer hubieras estado allí entre los más de 500 amigos y medios de comunicación, no habrías pensado que era un humano. Pero solo con el video, es difícil verlo con claridad. Por ejemplo, cuando estás de pie junto a él, puedes oír el sistema de refrigeración y un poco de ruido del ventilador».

A continuación, invitó al equipo de ingeniería a subir al escenario y dijo: «Si todavía crees que hay una persona dentro, mira esta mano. Es demasiado pequeña para ser una mano humana». El alto ejecutivo apuntó a las hendiduras en forma de oreja a ambos lados de la cabeza y explicó: «En realidad son micrófonos que hacen las veces de oídos humanos».

Para validar aún más su argumento, pidió al personal que abriera la cremallera de la parte trasera del robot frente a las cámaras para revelar la estructura mecánica interna debajo del traje.

A diferencia de la mayoría de los robots humanoides, la nueva generación IRON de XPENG está diseñada para «nacer desde dentro». Cuenta con una columna vertebral similar a la humana, músculos biónicos y una piel totalmente flexible que se puede personalizar para diferentes tipos de cuerpo, detalló una nota de la empresa.

Con 82 grados de libertad (DOF) en todo el cuerpo, el robot se mueve con naturalidad y elegancia, y es capaz de realizar acciones complejas, al estilo de una pasarela. Sus manos, con 22 DOF, alcanzan proporciones reales gracias a las articulaciones armónicas más pequeñas del sector. El IRON también estrena el primer uso de baterías de estado sólido de la industria, que ofrecen una ligereza excepcional, alta densidad energética y mayor seguridad, completó el comunicado.

XPENG declaró el jueves que su robot IRON se utilizará primero en escenarios orientados al servicio, como recepción, asistencia en compras y patrullaje.

Abordando una de las cuestiones más debatidas del rubro, si los robots humanoides deben parecerse realmente a los humanos, XPENG apuntó «ser lo más similar posible a los humanos». La firma cree que lograr una semejanza extrema es esencial para abordar los retos fundamentales de la comercialización, la generalización y el entrenamiento de datos.

Un representante de XPENG anotó que aspirar a una forma similar a la humana no es solo una elección estética, sino también práctica. «Si lo piensas bien, la inteligencia real no se puede programar, crece a través del aprendizaje de la IA, y los datos más ricos provienen del propio comportamiento humano».

«Nuestras casas, oficinas, fábricas... todo está construido para las personas. Por eso, cuando un robot se mueve y se comporta de forma más parecida a ella, puede integrarse de manera más natural». Añadió que la aceptación por parte de los usuarios es tan relevante como la tecnología. «A la gente tiene que gustarle y confiar en él. Un robot que resulta familiar es más fácil de tratar, más fácil de manejar, y así es como se consigue una adopción y una escala reales».

En comparación con el modelo de primera generación, el nuevo IRON ha pasado por una actualización completa en su diseño biónico, su sistema inteligente y su arquitectura energética, lo que le ha permitido una nueva apariencia e interacción similares a las de un humano. Equipado con tres chips de IA Turing que brindan una potencia de cálculo de 2250 TOPS, el robot estrena el primer modelo de XPENG para el mundo físico que integra los sistemas VLT, VLA y VLM para permitir un diálogo, un movimiento y una interacción avanzados, precisó la empresa.

El modelo VLT, especial para la robótica, sirve como motor central para el funcionamiento autónomo, lo que permite a IRON pensar, razonar y tomar decisiones independientes.

«Los robots con IA muy parecidos a los humanos tienen un gran potencial en el sector servicios», resaltó Ma Jihua, analista del ramo. «Pueden desempeñar un rol vital en el cuidado de personas mayores, la hostelería y la educación, donde la interacción natural entre humanos y robots es esencial». Agregó que para lograr tal realismo se necesita una IA potente. «Los robots no solo deben parecer humanos, sino también pensar y moverse como ellos».

«El robot de XPENG muestra un nivel de coordinación dinámica e inteligencia incorporada muy superior a la media actual del rubro», manifestó el jueves Liu Dingding, analista del sector. «Desde el movimiento continuo hasta el control de la postura, su estabilidad y fluidez biomecánica se asemejan mucho a las de un humano, lo que refleja una integración plena de percepción, control y modelado algorítmico».

Añadió que fabricantes de automóviles como XPENG y Xiaomi tienen ventajas únicas en el desarrollo de robots humanoides. «Construir robots es muy parecido a fabricar coches: ambos dependen de sensores, sistemas de control y algoritmos inteligentes. Los autónomos de nivel 4 ya son, en esencia, robots avanzados, y el siguiente paso podría ser algo parecido a los «Transformers» del mundo real».

Liu señaló que los avances de China en inteligencia incorporada marcan una rápida expansión de la IA en el mundo físico. «Ya sea en vehículos inteligentes, brazos robóticos industriales o robots humanoides, los sistemas subyacentes comparten la misma base de algoritmos de IA y potencia de cálculo. Con los continuos avances en percepción visual, planificación del movimiento y gestión de la energía, las diferentes formas inteligentes logran cada vez más una sinergia entre escenarios».