Un festín en el espacio

El pueblo chino es conocido por su rica y diversa tradición culinaria y apetitosos platos, lo que confirma el antiguo dicho: «Nunca te cansarás de la buena cocina».

Ahora, gracias a la tecnología de punta, 6 astronautas chinos han llevado la famosa gastronomía del país a la órbita terrestre, convirtiéndose en los primeros seres humanos en asar pollo y carne en el espacio, y también en degustarlos.

Los 3 tripulantes del Shenzhou XXI, que llegaron a la estación espacial Tiangong el sábado temprano, y sus compañeros del Shenzhou XX utilizaron un horno especialmente fabricado para cocinar alitas de pollo y filetes de res a la pimienta.

En un breve video transmitido el lunes por la noche desde la estación espacial, que orbita a una altitud de unos 400 kilómetros, se ve al ingeniero del Shenzhou XXI, el mayor Wu Fei, sacando las alitas de pollo marinadas de un paquete, colocarlas en una parrilla especial y meterlas al horno.

En las imágenes se puede escuchar al comandante del Shenzhou XXI, el coronel Zhang Lu, decir: «Mientras las alitas de pollo van al horno, todos deseamos ver cómo quedarán a 180 °C después de 28 minutos. Por favor, quédese con nosotros».

Más tarde, se ve a Wu sacando la rejilla con las alitas listas y asegura que huelen tan bien como se ven.

La bandeja pasa primero al comandante del Shenzhou XX, el coronel Chen Dong, quien se inclina para disfrutar del aroma del pollo asado, y luego deja que los demás hagan lo mismo. Chen también bromea diciendo que se le ha hecho agua la boca mientras esperaba la comida.

En el video, los astronautas se reúnen frente al horno y comen las alitas de pollo, coincidiendo que saben al cielo.

Wu y el coronel Wang Jie, miembro del Shenzhou XX, ambos originarios de la región autónoma de Mongolia Interior, conocida por su excelente carne de res y cordero, también preparan filetes a la pimienta y los comparten con los demás.

Según Liu Weibo, ingeniero del Centro de Astronautas de China, los investigadores diseñaron y construyeron el horno para su uso dentro de la enorme estación espacial.

«No importa dónde estemos los chinos, nos encanta la comida recién preparada. Preferimos cocinar, en lugar de comer alimentos congelados en seco», declaró a la Televisión Central de China. «Con este horno, se pueden hacer pasteles, asar carne o tostar maní. Enriquecerá el menú y mejorará la calidad de vida en órbita».

Wang Yanan, editor jefe de la revista “Conocimiento aeroespacial”, afirmó que crear un horno para el espacio nunca es una tarea fácil.

«A diferencia de lo que ocurre en la Tierra, donde el aire se agita dentro del horno, el proceso necesario de convección simplemente no se produce en el espacio. Por lo tanto, los ingenieros tuvieron que idear una forma de calentar los alimentos y gestionar el humo de la cocción, así como garantizar la seguridad de la tripulación», explicó.

En 2019, Estados Unidos envió un horno a la Estación Espacial Internacional y los astronautas hornearon galletas en microgravedad como parte de un experimento. Sin embargo, estas no se comieron en la estación, sino que se enviaron de vuelta a la Tierra para continuar con los estudios.

Hasta ahora, no se sabe que los astronautas hayan usado un horno en la estación internacional. Liu, del Centro de Astronautas de China, afirmó que el horno chino es el primero del mundo para su uso en el espacio.