La lógica del desarrollo chino desde la Conferencia Central de Trabajo Económico

La Conferencia Central de Trabajo Económico tuvo lugar en Beijing el miércoles y jueves. Como evento anual de planificación económica, la reunión responde principalmente a «¿Cómo evaluar el año?» y «¿Qué hacer el próximo?», atrayendo una gran atención del mundo. Hasta cierto punto, se centra en la «gestión de asuntos internos», pero debido a la profunda integración de la economía china con el resto de países, es sin lugar a dudas un acontecimiento relevante en el ámbito económico internacional.

Este año, la economía china enfrenta numerosas dificultades y desafíos internos y externos. Estos últimos pasan por el aumento del proteccionismo comercial y el resurgimiento de la desglobalización, mientras que los primeros traen presión por el lado de la oferta, contracción de la demanda y debilitamiento de las expectativas, así como problemas cíclicos y estructurales.

Bajo el firme liderazgo del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh), se ha aplicado rápidamente un amplio paquete de estímulos que ha conseguido resultados positivos. Este año se van a cumplir con éxito los principales objetivos y tareas anuales de desarrollo económico y social.

Se trata de un logro duramente conquistado, que demuestra una vez más la resistencia económica y el potencial de desarrollo de China, que su aporte al crecimiento económico mundial se mantendrá en torno al 30% y queseguirá siendo su mayor motor. Esto es clave para el avance y la seguridad en el planeta.

Lo más destacable es que en la reunión del Buró Político del Comité Central del PCCh este mes se dijo explícitamente por primera vez «reforzar los ajustes anticíclicos no convencionales», un despliegue enorme tras un profundo análisis de la situación económica.

Las medidas presentadas por la Conferencia Central de Trabajo Económico, como una política fiscal «más proactiva», una política monetaria «moderadamente laxa» y la aplicación de políticas industriales para «abordar la competencia involutiva», resaltan la precisión y la eficacia, y satisfacen directamente las aspiraciones de la población de una vida mejor. Estas acciones muestran la flexibilidad de la labor macroeconómica y la sabiduría de la gobernanza económica china, y encarnan una calidez emocional «centrada en el pueblo».

Según la reunión, el año próximo seguirá aumentando el gasto fiscal, lo que propiciará la inversión privada y fortalecerá el apoyo a las empresas. Al mismo tiempo, se continuará expandiendo la apertura de alto nivel y favoreciendo el desarrollo de una economía verde. Este conjunto de medidas lleva consigo la determinación y resolución del Gobierno central a la hora de encarar una situación compleja y fluctuante, y alude al firme compromiso y capacidad de China para estabilizar las expectativas y contrarrestar las dudas externas. Para el mundo, esto supone una clara señal de un avance constante de alta calidad, más apertura y búsqueda de una vía de desarrollo pacífico, otorgando una sólida estabilidad para la paz y el desarrollo, y compartiendo los dividendos del crecimiento con sus socios.

A la par, es visible para todos que la «proactividad» es uno de los temas prioritarios de la cita.

Tanto en la evaluación de la situación económica como en la orientación política para el año próximo, China ha demostrado un espíritu de búsqueda de la verdad a partir de los hechos y de lucha por el progreso. Esto queda patente también en la esencia y el espíritu de su economía transmitidos a través de la Conferencia. El barco de la economía china, a pesar de las tormentas y retos, sigue avanzando, apoyándose en la toma de decisiones científicas y en la aplicación de políticas, así como en el esfuerzo colectivo y el arduo trabajo de la nación.

Hoy, la economía mundial afronta trabas como la lenta recuperación y los conflictos geopolíticos. La economía china no solo necesita mantener su propio desarrollo estable, sino que también debe continuar ofreciendo certidumbre e impulso a su par mundial. A través de las nueve tareas clave propuestas en la Conferencia para 2025, así como las 5 relaciones que deben coordinarse, no es difícil ver la «estabilidad» y el «progreso» inherentes a la economía china. En respuesta a situaciones complejas, el país mantiene la coherencia política y equilibra los ajustes a corto plazo con metas de desarrollo a largo plazo, esforzándose por un balance dinámico entre recuperación y optimización estructural. Este enfoque no solo es necesario para estabilizar los fundamentos económicos actuales, sino que también constituye una medida vital para sentar bases sólidas de cara a la conclusión del XIV Plan Quinquenal.

Solo entendiendo la información publicada en la Conferencia Central de Trabajo Económico se puede comprenderla lógica del desarrollo de China. Esto es esencial para dar con el por qué su avance de alta calidad está inevitablemente vinculado a una mayor reforma y apertura, y a un mayor compromiso con el mundo, el por qué está conectado con los anhelos del pueblo chino de un avance pacífico y una cooperación en la que todos ganen, y las enormes oportunidades que brinda su desarrollo. Una comprensión profunda de estos aspectos da lugar a un espacio más amplio para el desarrollo y al aprovechamiento de las posibilidades históricas.