2011Fotos>China>
spanish.china.org.cn | 15. 03. 2019 | Editor:Teresa Zheng [A A A]

Lecciones del éxito de China en su lucha contra la contaminación

Palabras clave: Lecciones del éxito de China, lucha contra la contaminación

Cielo azul en Beijing, China, el 13 de marzo de 2019.


Hace solo algunos años, las ciudades chinas a menudo ocupaban los primeros lugares en las listas de las más contaminadas en el mundo, pero tal reputación parece cosa del pasado.

Existen dos razones para el cambio-la calidad del aire en otras economías como la india ha empeorado a medida que se industrializan, mientras que el nivel de sustancias tóxicas en las urbes chinas ha bajado considerablemente.

El tema deja una lección positiva para todos. Es posible reducir la contaminación del aire sustancialmente en solo unos pocos años, y el éxito de China merece compartirse con el mundo.

Su historia de industrialización y degradación del entorno en las últimas 3 décadas es de sobra conocida. El rápido desarrollo con un énfasis en las exportaciones generaba un deterioro del medio ambiente a nivel nacional. Lo que sucede con los esfuerzos de limpieza es que las autoridades declararon la guerra a este mal y su lucha es implacable.

La llamada “batalla por cielos azules” tuvo su origen en las Olimpiadas de Beijing 2008, puesto que aire limpio era una condición esencial para que los deportistas no bajaran su rendimiento en un evento de clase mundial.

Años antes de la justa, los científicos ya trabajaban en formas de reducir la contaminación para que la capital pudiera contar con cielos azules durante tan importante cita. Los expertos identificaron y analizaron todas las fuentes de deterioro del air, incluso aquellas lejanas que llegaban a la ciudad a través de las corrientes en los meses de verano.

Los encargados de delinear las políticas exigían evidencia con base en estudios para considerar con cuidado las opciones a la mano. Si debían pedir a las fábricas que cerraran sus puertas de manera provisional, la ciencia podría ayudarlos a precisar donde actuar a fin de optimizar el resultado final y minimizar la compensación requerida.

Análisis similares se utilizaron para mejorar la calidad del aire durante la Expo de Shanghai 2010, los Juegos Asiáticos de Guangzhou en noviembre de 2010 y la semana de la Cumbre de Líderes de la APEC 2014 en Beijing.

Dada la importancia pública de estos eventos, los líderes nacionales prestaron atención a la evidencia y a los medios de reducir la contaminación. Fue un gran ejercicio de aprendizaje para el país.

En tanto, el pueblo chino también exigía una mejor vida.

Es así que en poco tiempo, China aprendió dos lecciones. Primero, que la implementación de políticas con una base científica ofrece resultados confiables; y segundo, que juntar a especialistas con los responsables de dichas medidas en un diálogo regular acelera la toma de decisión y brinda a estos últimos la confianza para pasar a la acción. En cada caso, China tenía que actuar rápido, incluso si los pasos a seguir eran severos.

Para el 2017, la calidad del aire había mejorado mucho en toda la nación. El promedio anual de concentración del PM2,5, dióxido de azufre y otros elementos nocivos bajaron significativamente en más de 70 ciudades.

En un panel de discusión con legisladores de la Asamblea Popular Nacional APN en las dos sesiones de este año, el presidente Xi Jinping recalcó que no se toleraría sacrificio alguno al medio ambiente.

El primer ministro, Li Keqiang, también admitió que China no podía retroceder. En su Informe sobre la Labor del Gobierno ofrecido ante la APN el 5 de marzo, se comprometió a más acciones para recortar las emisiones y continuar con un desarrollo verde.

Los líderes chinos privilegian la ciencia y la toma de decisiones a partir de la evidencia a la luz de sus experiencias. Así, el sistema ha evolucionado a uno en el que la comunidad científica se ha convertido en un factor clave para la formulación de políticas.

India y otras economías en desarrollo pueden ciertamente aprender de la experiencia china en este aspecto. Es posible mejorar la calidad del aire en un corto tiempo, si uno sabe exactamente lo que tiene que hacer.


   Google+