Personas cargan bidones para llenarlos con gasolina, en una estación de servicio de combustible en el estado de Michoacán, México, el 11 de enero de 2019. El gobierno mexicano lleva a cabo desde el pasado 27 de diciembre un agresivo plan para combatir el robo de hidrocarburos en los ductos y en las refinerías de la petrolera, con la participación de 4,900 militares. El plan contempla el cierre de los ductos, por lo que la distribución de los combustibles se hace a través de camiones tanque, una medida que si bien redujo el robo de hidrocarburos provocó la falta de gasolina en algunos estados y en la capital mexicana.