Sobredosis masiva en Estados Unidos

En la pequeña ciudad del noreste de Estados Unidos, New Haven, sede de la famosa Universidad Yale, más de 70 personas sufrieron una sobredosis narcótica y empezaron a caer al suelo ante el asombro del equipo de urgencias.

La extraña reacción al K2, una marihuana sintética conocida como “spice”, se dio en el transcurso de 24 años entre el martes y miércoles. Más de 50 de los casos tuvo lugar en New Haven Green, un antiguo parque que bordea el campus de Yale.

Cuando llegaron los servicios de emergencia, hallaron a algunas personas inconscientes, otras vomitando, alucinando o con tensión alta y dificultad para respirar. Inmediatamente, les suministraron Naloxone, un medicamento para contrarrestar el efecto, para luego trasladarlas a centros médicos locales.

El incidente coincide con la publicación de un nuevo informe del Centro para el Control de las Enfermedades de Estados Unidos (CDC) esta semana, en el que se advierte que 72 000 ciudadanos murieron por similar condición en 2017.

Los opiáceos sintéticos como el fentanilo, que es entre 30 y 50 veces más fuerte que la heroína, son muy peligrosos. Apenas 2 miligramos, unos granos de sal de mesa, es una dosis letal para la mayoría de la gente e incluso la simple exposición puede provocar una reacción fatal, según la agencia estadounidense contra las drogas, la DEA.

El fentanilo es un anestésico y calmante, pero su alto margen de beneficio para los traficantes lo ha convertido en una droga rentable.

El CDC informó que entre 2015 y 2016 la tasa de muertes por sobredosis de esta sustancia se duplicó.