Los científicos chinos han logrado grandes avances en la conversión directa de olefinas de gas combinado, lo cual reducirá el consumo de energía petroquímica requerida para su producción.

El resultado de los estudios conducidos por la Universidad Tecnológica de Shanghai y el Institución de Investigación Avanzada de Shanghai, unidad de la Academia China de Ciencias sociales, se publicaron en el British scientific journal Nature el 5 de octubre.

La olefina es un compuesto de carbón utilizado mayormente en la fabricación de químicos industriales y plásticos. Es un elemento importante del caucho sintético, plásticos, lubricantes de alta calidad, alcohol, combustible de alta densidad, entre otros. El componente químico se obtiene de la combinación de petróleo y otros combustibles fósiles o de fuentes renovables como el maíz o la caña de azúcar.

Para conseguir la olefina del carbón o del gas natural se necesita cumplir varios pasos. Primero, se debe convertir la sustancia en gas de síntesis o syngas para crear metanol del cual deriva finalmente la olefina. Los científicos alrededor del mundo buscaban simplificar el procedimiento para incrementar la eficiencia energética.

El equipo de Shanghai creo un nuevo catalizador, el carburo de cobalto nanoprisma, que permite la conversión del synga con un alto grado de selectividad y bajo condiciones de mínima reacción, es decir bajas temperaturas y presión. No obstante el rendimiento de olefinas se mantiene alto.

En la siguiente fase del proyecto los expertos del Instituto de Investigación de Avanzada de Shanghai unirán esfuerzos con varias compañías para llevar a cabo la aplicación industrial del catalizador. Trabajarán en conjunto para diseñar un dispositivo de amplificación catalítica a fin de perfeccionar el proceso de producción del compuesto.