El presidente del club oficial de aficionados de la selección de Bélgica, Erik Reynaerts, murió la madrugada del domingo al lunes en Toulouse tras una crisis cardíaca, unas horas después de la victoria de los 'Diablos Rojos' ante Hungría (4-0) en los cuartos de la Eurocopa, según el periódico El Mundo.

"Después del partido contra Hungría en Toulouse, Erik sufrió una parada cardíaca. Murió poco tiempo después", precisó la Federación en un comunicado. El presidente y fundador del club de aficionados "Diablos Rojos 1895", de 50 años, fue trasladado a un hospital de Toulouse tras del partido.

"Erik puso las bases de '1895' en 2012 y era conocido en todo el mundo de los hinchas, tanto en Bélgica como en el extranjero. Era la personificación de nuestro club de fans. Su risa continuará resonando en nuestras cabezas, no le olvidaremos nunca", añadió la Federación.

Se da la circunstancia de que poco antes del torneo Reynaerts perdió a su mujer, que no pudo superar la batalla contra un cáncer.