La gran atención tanto dentro como fuera del país que recibe el XIII Plan Quinquenal que será revisado en la quinta sesión plenaria del XVIII Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh), se debe a que este plan es clave para que China logre su primera meta en su lucha centenaria. Para 2020, cuando se termine el periodo del plan China tendrá culminada la construcción de la sociedad modestamente acomodada. Frente a este momento clave y su importante misión histórica, la gente no puede dejar de imaginar lo impresionante que es este plan.

El plan no tiene pendientes, y en realidad tiene los menores asuntos sin resolver entre todos en la historia china.

Ante todo, el establecimiento de los índices del plan no tendrá pendientes, porque desde el período del décimo segundo plan, ya era normal prestar menos atención a los índices. Incluso las metas indispensables en el XIII Plan Quinquenal quizás no despertarán mucha atención, porque posiblemente habrán sido completadas. En segundo lugar, la opción estratégica del plan no tendrá pendientes. La transformación del modelo de desarrollo económico, la optimización de la estructura industrial, el desarrollo impulsado por la innovación y el desarrollo coordinado regional, y otras metas estratégicas ya presentadas en los XII y XI planes seguirán siendo las principales opciones estratégicas en el nuevo plan. Industria 4.0, Internet+, el espíritu innovador y emprendedor, “La Franja y la Ruta”, y “Hecho en China 2025”… estos son las nuevas expresiones de las estrategias ya existentes. Detrás del cambio de los términos, está la búsqueda inalterable de un desarrollo de mejor calidad y más eficaz, justo y sostenible.

No obstante, la falta de suspenses no significa que se puede disfrutar del beneficio ya logrado o tomar una actitud negligente. Por el contrario, habrá más retos, contradicciones y peligros potenciales.

Por eso, todos estos problemas necesitan un punto en el XIII Plan Quinquenal, especialmente un “punto estratégico”. Este plan no debe y no posee la posibilidad de continuar en las opciones estratégicas. Pese al vínculo cierto entre la estrategia de la sociedad modestamente acomodada y la tendencia estratégica de la modernización integral, las diferencias serán grandes. Completar verdaderamente las tareas ya existentes y poner un perfecto “punto estratégico” es una obligación para el periodo del XIII Plan Quinquenal. ¿Cómo poner un perfecto “punto estratégico”? La quinta sesión plenaria del XVIII Comité Central del PCCh ofrecerá la respuesta: determinar el concepto de desarrollo enfocado en el pueblo. El desarrollo se depende del pueblo y el desarrollo es para el pueblo.

Obviamente no es fácil lograrlo. Bajo la circunstancia de que el mercado juega un papel decisivo para la distribución de los recursos y frente a la tendencia de que el capital ejerce una influencia cada vez mayor, hay que garantizar que el mercado no se convierta en un campo de especulación de un pequeño número de personas y que el capital no perjudique la riqueza pública. Priorizar al pueblo, entrar en la fase final de la construcción de la sociedad modestamente acomodada e iniciar la modernización integral requieren de la gran sabiduría. Lo afortunado es que a lo largo del XVIII Congreso Nacional del PCCh, se la ve cada vez más en las políticas sociales del país, lo que sirve como la confianza para el trazar el “punto estratégico” del XIII Plan Quinquenal.