Sin embargo, la cantidad de turistas chinos que se dirigieron a México, otro país turístico de América Latina, creció desde los 19.903 de 2008 hasta los 75.665 en 2014, a un ritmo más acelerado, fenómeno que el consulado chileno en Beijing atribuyó a la política mexicana de exención para ciudadanos chinos con visados norteamericanos.

De igual modo, Costa Rica, Ecuador, Colombia y otros países de la región latinoamericana con interés en atraer a más turistas o hombres de negocio chinos han tomado medidas similares. Fuentes de la embajada chilena expresaron sus esperanzas de elevar el flujo anual de turistas chinos a su país en un 40 por ciento.

Las autoridades de inmigración de Estados Unidos estimaron en un estudio reciente que para 2021, y a medida que el poder adquisitivo de los viajeros chinos vaya creciendo cada vez más, la población de turistas chinos de visita en su país contribuirá con 85.000 millones de dólares a la economía estadounidense y creará 440.000 empleos anuales a través de actividades de compras y consumo.

Con las nuevas medidas preferenciales que entran en vigor a partir de hoy, un ciudadano chino que quiera visitar Chile por turismo o negocio no tendrá que pagar la cuota de 50 dólares por un visado de entrada simple o 75 dólares por uno de entrada múltiple, y podrá permanecer en el territorio chileno durante 90 días con la posibilidad de prorrogar su estancia por otros 90 días.

Y con un visado estadounidense o canadiense con vigencia superior a seis meses desde el día de su llegada a Chile, exceptuando el de tránsito, un ciudadano chino podrá evitar los trámites de solicitud de un visado chileno, confirmó la embajada chilena en China.

Por su parte, las autoridades chinas tampoco cobrarán tasas de solicitud de visado a los turistas u hombres de negocio chilenos, a la espera de animar más los intercambios no oficiales. En la actualidad, unos 2.200 chilenos llegan cada año al país asiático por motivos varios, según fuentes del consulado chileno.