El primer pedido extranjero de la empresa china de comercio electrónico Alibaba, el día 11 de noviembre del año pasado, fue de Brasil. En la mayor fiesta de compra en línea del mundo, que cayó en ese día, los compradores brasileños estaban muy activos, quedándose en el segundo puesto sólo tras los de Rusia. Las empresas de comercio electrónico de China están cambiando los hábitos de compra por Internet de los ciudadanos del país sudamericano.

Amanda Bernado es una de las participantes más activas. Es periodista de la sección de moda en el Estado de Santa Catalina y, además, experta en compras en línea de Brasil. Los vídeos sobre las compras en línea que graba Bernado han tenido más de un millón de reproducciones. Su última obra es sobre los productos chinos que consiguió de la página web AliExpress, subordinada al grupo Alibaba, como cajas de almacenaje de unos yuanes, y ropa y bolsas de miles de yuanes. En un solo mes, el video ha conseguido miles de espectadores.

Brasil es el mayor país en cuanto a tráfico de Internet en América Latina, contando con más de 100 millones de cibernautas. Las compras en línea constituyen su actividad principal. Los datos E-bit, una empresa brasileña dedicada a la investigación del consumo en línea, revelan que el año pasado aparecieron 10,2 millones de nuevos compradores en línea, incrementando la cifra total de este grupo a 51,5 millones. Más del 40% de estas personas han comprado en las plataformas internacionales de comercio electrónico, como AliExpress.

El volumen de compra en línea de Brasil en 2014 alcanzó los 35.800 millones de reales (casi 11.900 millones de dólares), creciendo un 24% interanual. La totalidad de los pedidos sumó 103 millones, cifra que representa un aumento del 17% en comparación con el año anterior. 6.600 millones de reales (2.200 millones de dólares) del consumo provinieron de las compras en el exterior, ocupando el 18,4% del total de las hechas en Internet. De estos, las páginas web de compra de China representan una cuota del 55%.

De hecho, a juicio del número de pedidos, AliExpress ya había superado al conocido grupo brasileño de comercio electrónico B2W a finales del año pasado, para convertirse en la mayor plataforma de compra en línea del país sudamericano.

No obstante, todavía existe un largo camino por recorrer para las empresas de comercio electrónico de China si quieren ser aceptadas completamente por los brasileños. El idioma, la logística y los hábitos de uso son tres factores que restringen su desarrollo en Brasil.

“El portal AliExpress tiene una versión portuguesa, pero se usan principalmente el inglés y el sistema de traducción al comunicarse con los vendedores chinos. Es un dolor de cabeza encontrarse con los que no hablan muy bien el inglés”, señaló Calheiros embarazosamente, quien vive en Sao Paulo. Dijo que muchos amigos suyos querían probar AliExpress por su recomendación, pero debido a la diferencia de eBay y Amazon en distribución de la página web y la forma de pago, varios no se atreven a cambiar su costumbre. Así que entre los productos que compra cada mes Calheiros, casi la mitad son para sus amigos. Hay internautas que dicen que no pueden acostumbrarse a la forma de pago de AliExpress en comparación de la de eBay. Algunos han redactado consejos de uso y búsqueda en AliExpress para aquellos que no están familiarizados con su sistema.

Por otro lado, debido a la distancia geográfica entre China y Brasil y los complicados trámites del despacho de aduanas de Brasil, lo que compra Calheiros en AliExpress tarda un promedio de dos meses y medio en llegar, y eso gracias a su experiencia en la selección de los vendedores y la logística.

Pese a la situación, frente al débil crecimiento económico y la subida de los precios en Brasil, la compra de productos buenos y baratos chinos en Internet se está convirtiendo gradualmente en la opción escogida por más brasileños cada día. Incluso con el impuesto de importaciones del 60%, el precio de los productos comprados en AliExpress es mucho más bajo que el en los mercados locales. Por ejemplo, el precio de los trajes, maletas y bolsas es en general un tercio del precio local.