El vendado de pies es una costumbre mala y particular de la sociedad feudal de China. Se aplica una venda ajustada a los pies de jóvenes niñas para prevenir su crecimiento, con el fin de formar pies pequeños para corresponder al gusto estético de la sociedad. En aquel período, la mayoría de las mujeres tenían los pies vendados desde los 4 ó 5 años hasta su madurez, cuando los huesos ya tienen una forma definitiva. También había algunas que los tenían vendados hasta su muerte.

Esta práctica tiene varios orígenes, tales como la dinastía Sui, la dinastía Tang o las Cinco Dinastías. También existe el dicho de que la esposa de Yu de la dinastía Xia y la concubina Da Ji de la dinastía Shang tenían los pies pequeños.

Hay unas descripciones en las leyendas de la China antigua. Según dicen, cuando Yu trabajaba para frenar las inundaciónes, se casó con Tushanshi, quien tenía un espíritu de zorra y tenía pies pequeños. También dicen que la concubina Da Ji del rey Zhou de la dinastía Yin tenía un espíritu de zorra, pero los pies de Da Ji todavía conservaban la forma de zorra, por lo que vendaron sus pies. Debido a que Da Ji gozaba del favor del rey, las otras mujeres de la corte la imitaban en vendarse los pies. Por supuesto que esto son sólo mitos y leyendas que no pueden ser evidencias del vendado de pies.

El dicho de que se originó en la dinastía Sui también es una leyenda. Cuando el emperador Suiyangdi viajó a Jiangdu, reclutaron unos cientos mujeres bellas para sirgar para él, entre ellas estaba una mujer llamada Wu Yueniang. Ella odiaba al emperador por su tiranía y pidió a su padre herrero que forjara un cuchillo pequeño para vendarlo bajo su pie. Al mismo tiempo, esculpió una flor de loto en la suela del zapato. Entonces, cuando caminaba, dejaba huellas de flor de loto en el suelo, lo que despertó el interés del emperador y la llamó para que se acercara y ver sus pies. Wu Yueniang abrió las vendas lentamente, y de repente apuñaló con el cuchillo escondido al emperador. Desafortunadamente, el emperador escapó de la puñalada y sólo fue herido en el brazo. Al ver el fracaso del asesino, Wu Yueniang se lanzó al río para suicidarse. Después de este incidente, el emperador ordenó que se no votara a las mujeres con pies vendados en los concursos de belleza, aunque fueran muy guapas. Para conmemorar a Wu Yueniang, las mujeres vendaron sus pies y así se popularizó esta práctica.

Al mencionar el “loto dorado”, cabe explicar por qué la gente llama a los pies vendas “loto dorado” y qué relación tienen. La gente se interesa por esta temática, pero todavía no hay una explicación satisfactoria.

Algunos estudiosos creen que necesitan investigar la relación entre los pies pequeños y loto dorado desde el sentido de loto en la cultura budista. El loto es considerado como un símbolo de pureza, ya que crece en el fango pero conserva su belleza. Con la difusión del budismo en China, la gente también acepta la concepción de que el loto es un símbolo de belleza, pureza y buen agüero, y los chinos también utilizamos loto en las palabras y dibujos de deseos. Por eso, el llamado “loto dorado” es sin duda una admiración de los pies pequeños. Al otro lado, en el arte budista, los budas siempre están en pie en un loto, lo que también será una razón importante para relacionar los pies pequeños con el loto. Sin embargo, ¿por qué loto “dorado”? Quizás esto es debido a la manera de hablar de los chinos. Generalmente, preferimos utilizar “dorado” para describir las cosas preciosas o bellas, por ejemplo, “boca dorada”, “ojos dorados”, “palacios dorados”, etc. En los tiempos en que se consideraba el vendado de pies como un canon de belleza, utilizaban la frase “pie dorado” para expresar su preferencia. Posteriormente, los aficionados al vendado de pies clasificaron el vendado según la longitud del pie, llamando “loto dorado” a los pies con longitud menor de 3 cun (un cun equivale un tercio de decímetro), “loto de plata” a los pies de menos de 4 cun, y “loto de hierro” a los pies mayores de 4 cun. Entonces, el loto dorado se convirtió en un sinónimo de pies de menos de 3 cun, y posteriormente, se refirió también al zapato para los pies vendados.