Un hombre fue arrojado desde una azotea por su supuesta homosexualidad, 13 jóvenes ahorcados por ver un partido de fútbol y 16 combatientes yihadistas liquidados por huir del campo de batalla. Estos son los últimos crímenes perpetrados por el Estado Islámico (EI) en Mosul.

El EI ha publicado en el foro que habitualmente utiliza para divulgar sus acciones criminales imágenes de dos encapuchados que lanzan desde lo alto de un edificio en el centro de Mosul a un hombre acusado de ser homosexual, ante la mirada de un elevado número de público. “Los musulmanes acuden para ver la aplicación de la Sharia”, reza uno de los pies de foto.

El resto de imágenes muestra a la víctima cayendo al vacío y su cuerpo estrellado sobre el cemento de la plaza. El texto que acompaña a las imágenes dice que es “una de las personas de Lot”, en referencia a los habitantes de Sodoma y Gomorra, castigados por Dios por sus desviaciones sexuales.

También han hecho públicas una fotografía de dos hombres con barba, que podrían ser miembros del EI que no han acatado con rectitud sus normas, con los ojos vendados y atados a una estructura de metal simulando estar crucificados. Sus “camaradas” yihadistas les descerrajan un tiro en la nuca en medio de una plaza en Mosul.

El último crimen difundido muestra la lapidación de una mujer envuelta en un niqab (prenda que cubre todo el cuerpo excepto los ojos) en un parque de la ciudad.

Pero no son estos los últimos crímenes cometidos. Las Brigadas de Liberación de Nínive (un grupo detractor del EI) denunciaron la ejecución el sábado de cuatro personas, dos de las cuales fueron arrojadas desde la sede de la Compañía Nacional de Seguros.

Además, 13 jóvenes de la ciudad fueron arrestados recientemente por patrullas de la organización yihadista por ver un partido de fútbol en la televisión que enfrentaba a las selecciones de Irak y Jordania. Los detenidos fueron trasladados a un estadio de la ciudad donde fueron ahorcados en presencia de una multitud.

Tras el crimen, las autoridades recordaron que el fútbol es “haram” (ilícito), según su fundamentalista versión del islam. Según la prensa local los jóvenes permanecen aún colgados, por lo que sus familiares, temerosos de las represalias, no han podido celebrar sus sepelios.

Los yihadistas mantienen un férreo control sobre Mosul. A principios de diciembre se anunció la interrupción de las líneas telefónicas sin dar explicaciones, lo que aumenta el aislamiento de una ciudad con más de un millón y medio de habitantes. La prensa local sostiene que la suspensión se debe a la negativa de las empresas de telecomunicaciones a seguir pagando extorsiones. Otros aseguran que la medida busca evitar que los detractores del EI que viven en Mosul puedan comunicarse con el exterior. La medida, en cualquier caso, está alimentando la ira popular y estrangulando aún más la escasa actividad comercial y económica.