
Meryl Streep, la actriz más nominada en la historia del Oscar, ha batido este año su propio récord. Desde su primera nominación en 1979 por El cazador, no han pasado más de cinco años sin que fuera candidata al trofeo de Mejor actriz o Mejor actriz de reparto. Su récord no sólo es una prueba de amor de los miembros de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas, sino también de la regularidad ejemplar de su carrera y la excelencia de sus elecciones. Streep, que se llevó su último Oscar hace dos años por su encarnación de Margaret Thatcher en La Dama de Hierro, ya había hecho historia entonces al confirmarse como una de las principales actrices de su generación. Sus otras dos estatuillas fueron a Mejor actriz de reparto en 1980 por Kramer contra Kramer y a Mejor actriz en 1983 por La decisión de Sophie.