Los conductores chinos tendrán que pagar más para llenar el depósito a raíz de una política emitida por el gobierno para reducir la contaminación a través de la mejora de la calidad del combustible.

En los próximos dos años, los precios de la gasolina y el diésel que cumplan el estándar nacional de "cuarta fase" subirán 290 yuanes (46,8 dólares) y 370 yuanes por tonelada, respectivamente, informó hoy lunes la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR), el máximo planificador económico del país.

Después de 2017, los precios de la gasolina y el diésel que cumplan el estándar nacional de "quinta fase" subirán otros 170 yuanes y 160 yuanes por tonelada, respectivamente.

China ha anunciado estándares más estrictos para el combustible de los automóviles con el objetivo de reducir las emisiones perjudiciales como respuesta a la neblina tóxica que envolvió la mayor parte del país a comienzos de 2013.

El Consejo de Estado (gabinete) ha ordenado que el contenido de azufre de la gasolina y el diésel se reduzca a no más de 10 ppm (partes por millón) de cara al 2017, en comparación con las 50 ppm del estándar de cuarta fase.

Beijing es la única ciudad de China que ya ha adoptado el estándar de quinta fase, que equivale al estándar Euro V de Europa. El contenido de azufre del estándar europeo es inferior a 10 ppm.

De acuerdo con la CNDR, una quinta parte de las partículas contaminantes suspendidas en el aire de diámetro inferior a 2,5 (PM 2,5) procede de las emisiones de los vehículos.