Sr. Gillibrand, miembro del Partido Demócrata y Steve Israel, diputado de Estado de Nueva York enviaron conjuntamente una carta al Comité Olímpico de los Estados Unidos exigiendo que todos los uniformes olímpicos del país sean producidos por los obreros estadounidenses. Y dijeron que así traerá un ingreso de 1000 millones para la economía del país.
Gillibrand explicó: “Cuando los mejores atletas de Estados Unidos nos representen en el escenario mundial … deben ser ‘hechos en EE.UU’ de pies a cabeza.”
Steve Israel enseñó: “Es una vergüenza que nuestros atletas llevan uniformes hechos en China durante los Olímpicos. Tenemos que promover los productos de los EE.UU. y apoyar a nuestros fabricantes y obreros. Urjo que el Comité Olímpico reconsidere su decisión.”
Sandusky contestó a la interpelación de los usuarios de Internet en Twitter: “Todas las discusiones sobre los uniformes olímpicos hechos en China no tienen sentido. Ralph Lauren es una compañía estadounidense que apoya a los atletas de los Estados Unidos.” E hizo una pregunta en réplica: “Quiero saber ¿en qué país están hechos las ropas que llevan ustedes? ”
Entre las voces de oposición, también hay alguien que critica que eso va en contra de la “libertad de mercado” y el espíritu de Deporte sin Fronteras. La “politización” de la ropa olímpica es bastante ridícula.