Las reliquias de Buda son huesos y joyas en forma de perla encontrados tras la cremación del cuerpo de Sakyamuni. Hace 2.500 años, después que el creador del budismo entrara en el nirvana, sus discípulos descubrieron entre sus cenizas un hueso del cráneo, dos escápulas, 4 dientes, parte del hueso del dedo del medio y 84.000 fragmentos de hueso en forma de perla. Estas reliquias son consideradas sagradas por los creyentes budistas y muy veneradas. Algunas reliquias budistas del fundador se conservan en China, a saber:
Resto del cráneo: en el Templo Ayuwang, ciudad de Ningbo, Zhejing.