Cuando uno mira desde las alturas al conjunto del complejo, se da cuenta de que los patios están ordenados de forma que dibujan los caracteres chinos “喜喜” o “doble felicidad”. Los arquitectos lo veneran como uno de los más exquisitos ejemplos de imponentes casas privadas que se conservan en el norte de China. En la actualidad, ha sido reconvertido en museo, conteniendo una notable colección de muebles de época.