Puente de Lugou
Este puente es conocido fuera de China por la descripción que de él hizo Marco Polo en su ‘Libro de las Maravillas’, tras su visita a Cambaluc (Pekín), la capital de la dinastía Yuan; sin embargo, en China es más conocido como el escenario de una batalla contra los japoneses en el siglo XX.
El Puente de Lugou se posa sobre el río Yongding en el distritu urbano de Fengtai, a 15 kilómetros aproximadamente al suroeste de Pekín, y es el puente arqueado de piedra más antiguo de esta ciudad. El río Yongding era denominado antiguamente río Lugou, de ahí el nombre del puente.
El Puente Lugou se construyó inicialmente en el año 1189, se restauró en el 1444, se destruyó en el reinado de Kangxi de la dinastía Qing y se reconstruyó en 1698. En la actualidad el río Yongding está seco.
El Puente Lugou tiene una longitud total de 267 metros, una anchura de 7,6 metros, y 9,5 metros en la parte más ancha. Es el puente antiguo más largo en el norte de China, posee 10 pilares y 11 arcadas. Cuenta con una estructura completamente de piedra, y sus partes sustanciales están conectadas entre sí con espigas de hierro.
El 7 de julio de 1937 el imperialismo japonés desató en este lugar una plena guerra de agresión a China. Los soldados chinos apostados en Wanping opusieron una tenaz resistencia, suceso que es conocido en la historia china como el ‘Incidente del Puente de Lugou’, o el ‘Incidente del 7 de Julio’.
La “Luna de madrugada en el Puente de Lugou” es uno de los ocho paisajes más famosos de Yanjing, antiguo nombre de Pekín. En la antigüedad, el emperador Qianlong pasó en un día de otoño por el puente e inspirado por el pintoresco paisaje, compuso una poesía para elogiarlo, con unos versos que significan: “Luna de madrugada en el Puente de Lugou”. El verso fue grabado posteriormente en una lápida y se colocó en un extremo del puente.