Zhang Hude, profesor de la Universidad de la Medicina Tradicional China de Beijing propone que también se puede amasar el abdomen después de comer. Se pone la mano sobre el ombligo y se realiza el masaje en sentido de las agujas del reloj y en sentido contrario de las agujas del reloj de manera alternativa, ello puede promover la digestión.
Aplicar calor al vientre también puede lograr un efecto de conservación de la salud. Se puede usar bolsa termal o toalla caliente colocada sobre el ombligo y quitarlas después de varios minutos, una o dos veces al día. Fuera de casa, se puede poner la mano calientita sobre el ombligo.
Apretar suela del pie puede agilizar la circulación sanguínea. El pie es conocido en China como el “segundo corazón” del ser humano. Tiene puntos relativamente numerosos y miles de nervios terminales, por eso tiene estrecha relación con la salubridad de los diversos órganos del cuerpo humano.
Zhang Hude sostiene que bañar los pies con agua caliente una vez por dos o tres día y cada vez por media hora es un medio muy simple para la conservación de la salud, porque tiene efecto de calentar los meridianos y dragar los colaterales y promover la circulación sanguínea. Si se pone algunas hierbas medicinales en el agua será mejor, tales como angélica, alazor, pseudo-ginseng, ligusticum wallichii, amaro, etc. envueltas con gasa en bolsitas medicinales. Se las pone con antelación en el agua caliente y media hora después ya tiene efecto curativo. Además, también se puede añadir un poco de licor o vinagre. Es un medio que se recomienda en especial para las personas que padecen del insomnio.