Stéphane Rousson, el ingeniero francés que inventó el primer submarino a pedales, ha realizado esta semana la primera prueba bajo el agua de su invento con éxito, según ha publicado el periódico Dailymail.

Este submarino, bautizado como Scubster, tiene 3,5 metros de largo y en él sólo cabe una persona. En la superficie es muy parecido al que utilizaba James Bond, y está diseñado para desplazarse a una profundidad máxima de 6 metros y a gran velocidad. Si el conductor tiene suficiente fuerza, puede alcanzar incluso los 8 kilómetros por hora.

La primera prueba de Scubster fue en el mar del sur de Francia, y duró una hora. Durante el proceso, el submarino estaba totalmente cerrado y el conductor tuvo que respirar con la ayuda de la mascarilla de oxígeno.

Los expertos creen que aún se requiere tiempo para comprobar el valor comercial del submarino. Rousson, sin embargo, considera que su invento tendrá buena acogida entre las clases altas, y espera también en participar en la competición internacional de submarinos que se celebrará el año próximo en EE.UU.