Zhu Guohua, director general de Wensli, indicó que después de confirmar los diseños del vestido, se decidió usar técnicas tradicionales complicadas que fueron usadas en la antigüedad para los trajes de la corte. Las únicas artesanas con las habilidades para realizar dicho trabajo estaban en Suzhou. Tu Hongyan envió un gran equipo para buscar aldeas famosas por sus bordados. La primera de dichas artesanas que encontraron tenía 84 años, y a través de ella encontraron a muchas más. Finalmente, una agencia de bordado que servía a clientes japoneses les ayudó a reunir a las 80 trabajadoras de Jiangsu y Zhejiang.