Aunque no estuvo en el plan de medallas olímpicas del país anfitrión, el discreto equipo chino femenil de hockey sorprendió al mundo al llevarse la medalla de plata en Beijing, con lo que logró su mejor actuación a nivel mundial y la primera medalla olímpica en su especialidad.

El vigoroso equipo, que no atrajo mucho la atención, ofreció un sorprendente regalo olímpico al pueblo chino desanimado por la eliminación de sus equipos de fútbol, baloncesto, voleibol, balonmano, softbol y béisbol.

En su propio territorio y en la lucha por llegar a la final, las jóvenes chinas, dirigidas por el entrenador sudcoreano Kim Chang-back, superaron a Australia, campeonas en Atlanta y Sydney, y a Alemania, campeonas en Atenas.

Ante las actuales número uno del mundo, las holandesas, hoy viernes por la noche en un estadio lleno, las chinas lograron mantener la hoja en blanco hasta el minuto 51 cuando un tiro de esquina penal fue coronado por la holandesa Van As Naomj para dejar el marcador en 1-0.

Maartje Goderie anotó otro tanto en el minuto 62 para el 2-0 a favor del más experimentado equipo holandés.

Además de los dos goles, lo más atractivo de la noche fue el juego equilibrado entre los dos equipos en busca del triunfo.

La medalla fue esperada durante mucho tiempo, aunque no fue la de oro.

Con una derrota ante Holanda y un empate ante Australia, China tuvo altas y bajas para llegar a la semifinal.

Sin embargo, China aprovechó una oportunidad crítica y venció a las campeonas defensoras de Alemania por 3-2 para pasar a la final, lo cual constituyó una dulce venganza después de perder 4-3 contra Alemania en tiros penales en la semifinal de los juegos de Atenas.

Holanda estaba buscando su primer oro desde los juegos de Los Angeles y finalmente cumplió su sueño. Fueron medallistas de plata en Atenas y medallistas de bronce en 1996 y en el 2000.

Antes de a final de ayer, las número dos del mundo, las argentinas, se llevaron el bronce al vencer 3-1 a las alemanas.