El jefe de la oficina de protección Wang Yuwei, de la administración de patrimonio cultural de Beijing, recalcó que para la apertura de nuevos tramos la clave consiste en garantizar la seguridad y añadió que Beijing ha empleado cada año más de diez millones de yuanes en el reforzamiento de la Gran Muralla. Las reparaciones han concluido en Lupiguan en el distrito de Miyun y en Jiangjunguan en el distrito de Pinggu y se han eliminado en lo básico los graves peligros de seguridad que habían perdurado por largo tiempo, así que ahora se han reunido las condiciones para abrir más tramos, reveló.